Fabio Coentrao llevaba más de un año 'desaparecido' de los terrenos de juego. Su último partido como profesional tuvo lugar el 12 de mayo de 2019, hace 513 días, en el que el Río Ave cayó derrotado contra el Benfica (2-3). Aquel encuentro fue su despedida, aunque nadie imaginaba entonces que sería por tanto tiempo.

A sus 32 años, Coentrao regresa al fútbol. Lo hace de vuelta al Río Ave, pese a que los rumores en 2019 apuntaban a su marcha al fútbol brasileño. Y es que el verano pasado se rumoreó que acabaría jugando en el Flamengo de Jorge Jesus. No fue así y pocos supieron más de él en público. Su única aparición fue en el juicio sobre el asalto de los ultras del Sporting CP a su ciudad deportiva y se declaró como "futbolista retirado".

Más tarde de aquello, Coentrao daría muestras de que no era así y quería volver a jugar al fútbol. "La mejor cosa que Dios me dio en la vida. La segunda está por venir", adelantaba en sus redes sociales en una foto con su familia con un enigmático mensaje acompañado de emojis de balones de fútbol. Su regreso ya es una realidad.

Coentrao vuelve al Río Ave y no ficha por el Paços Ferreira como también se rumoreó este verano. El anuncio ha sido a lo grande y de una manera especial, a lo Dragon Ball (o Bola de Dragón, como se conocía en España al mítico cómic y anime de los 80 y los 90). "¡Pide un deseo! Y esta vez no necesitas siete de éstas", rezaba el mensaje del club con Coentrao sujetando una de las famosas bolas mágicas.

"Si hay un club que amo desde que nací, ése es el Río Ave", asegura Coentrao en su regreso al club de su ciudad y en el que comenzó su carrera deportiva que luego le llevaría al Benfica y al Real Madrid. Fue en el club blanco donde tocó su pico deportivo, pero acabaría siendo cedido a Mónaco y Sporting CP antes de desvincularse del club blanco.