Zinedine Zidane tiene un plan, un plan que no es nuevo, pero que sí es efectivo. Al menos así lo demostró en su momento, ya que se trata de la receta perfecta que el francés llevó al éxito más absoluto como nadie había hecho antes. El técnico galo llevó, en su anterior etapa en el Real Madrid, la idea de las rotaciones a su máxima expresión y le sirvió para terminar levantando una liga y una Champions en la misma temporada. 

Las rotaciones son algo necesario en el fútbol, especialmente en el fútbol moderno donde se juega cada pocos días y en el que los clubes tienen que ceder a muchos de sus futbolistas para jugar con sus selecciones en períodos de descansos. Por eso, repartir los minutos de juego para intentar que todos o casi todos lleguen frescos al tramo decisivo de la temporada es clave. 

Además, las rotaciones permiten una cosa muy importante, y es que todos o casi todos los jugadores de la plantilla estén conectados y enchufados, lo que permite en cualquier momento echar mano de cualquiera y que este rinda, aunque no sea titular y aunque no juegue habitualmente muchos minutos. Sin embargo, si ha tenido su cuota de protagonismo correspondiente, se sentirá implicado en la causa y lo dará todo con una mayor facilidad y en unas mejores condiciones. 

Rotaciones para un inicio de liga exigente

Zidane ya ha afirmado que, efectivamente, las rotaciones en su plantilla es el plan que ahora mismo pasa por su cabeza para afrontar este exigente inicio de temporada con las mayores garantías y en las mejores condiciones. Y, además, lo hará desde el mismo comienzo, tal y como demostró en San Sebastián con la entrada de Odegaard en el once titular en lugar de Casemiro

Casemiro y Silva, durante el Real Sociedad - Real Madrid Reuters

Si hay un jugador que siempre o casi siempre acumula una gran cantidad de minutos a lo largo de la temporada ese es el brasileño, que no cuenta con un sustituto natural en la plantilla y que, debido también a su enorme capacidad física, juega casi todos los partidos. Por ello, Zidane sabe que cuanto más partidos pueda darle de descanso ahora, en mejor forma llegará al tramo decisivo de la temporada. 

Además, en un inicio de liga tan diferente como el de este año, rotar a la plantilla se antoja clave por diversos motivos. El primero de ellos es la falta de una preparación idónea. La temporada pasada terminó hace relativamente poco y, tras unas merecidas vacaciones, los jugadores del Real Madrid han tenido muy poco tiempo para prepararse físicamente para la nueva temporada. Por ello, repartir sus minutos para no provocar lesiones y desgastes innecesarios es primordial. 

Otro de los motivos por los que es muy importante ese reparto de minutos es, precisamente, porque todos necesitan ponerse a punto cuanto antes. Zidane necesita poner a todos sus jugadores para paliar la falta de pretemporada. Sin minutos de juego, muchos podrían quedarse cortos en esa preparación. Por ello, el francés debe encontrar el equilibrio para que ningún jugador sufra desgaste y dar oportunidades a todos para que vayan cogiendo ritmo competitivo y vayan estando al máximo en una temporada que, como la pasada, encierra en sí misma muchas particularidades. 

Una plantilla con alternativas

Tal y como el propio Zidane ha confirmado, suplencias como la de Casemiro en el Reale Arena serán más normales de lo habitual. A pesar de que el francés tenga un once tipo que sea el que exhiba en las grandes citas, estará totalmente normalizado en la plantilla que cada domingo o en cada choque, algún jugador que a priori no parta como titular, juegue desde el inicio y dé descanso así al teórico titular de su puesto. Las rotaciones son una parte muy necesaria del fútbol hoy en día y Zidane quiere aprovechar la amplitud de su plantilla. 

Un puesto en el que las rotaciones seguramente sean constantes será el lateral izquierdo. Es la demarcación que mejor se adapta a esa filosofía. En ella, se está produciendo un cambio generacional entre un jugador leyenda del club que cada vez participará menos, Marcelo, y un jugador, fichado recientemente, con unas capacidades físicas impresionantes, pero que todavía no se ha consolidado como titular indiscutible, Ferland Mendy. Zidane dispone de dos buenísimas opciones que alternará a lo largo de la temporada buscando siempre el mayor rendimiento. 

Mendy dispara y marca ante la portería del Granada REUTERS

El centro del campo es otra zona donde sobra las alternativas. A los habituales Modric, Kroos y Casemiro se unen varios jugadores, especialmente jóvenes, que podría dar oxígeno a cualquiera de los integrantes de este medio campo histórico. Además, ofrecen la posibilidad de cambiar el esquema e introducir variantes nuevas como el doble pivote con el media punta por delante como ya se vio ante la Real Sociedad, o incluso jugar con cuatro en el medio. La versatilidad que le dan a una plantilla jugadores como Odegaard o Fede Valverde puede ser clave para afrontar el inicio de liga con las mayores garantías posibles. 

Y arriba, Zidane dispone de todo un arsenal de diferentes armas para jugar a todo lo que se le ocurra. En San Sebastián, Vinicius y Rodrygo acompañaron al indiscutible Karim Benzema, pero no son ni mucho menos las alternativas. Para el puesto de nueve, sustituyendo o acompañando a Benzema, están Jovic y Mariano, además de Borja Mayoral que tiene muy encaminada su salida a la Roma. El delantero serbio es el que parte con más opciones de contar con más minutos, ya que podría jugar como referencia única arriba o acompañando al francés. Luka ofrece un carácter más rematador al que ofrece Karim, aunque ambos pueden jugar lejos del área, con movilidad y cayendo a las bandas. 

Hazard y Jovic entrenando

Y por las bandas, Zidane tiene magia, mucha magia. Pronto volverán las otras dos alternativas, llamadas a ser titulares en el equipo, y que parten como las grandes referencias ofensivas en cuanto a calidad y talento. Hazard y Asensio completarían una delantera de ensueño en la que, de momento, Rodrygo y Vinicius ya han demostrado poder estar sin temer a ninguno de sus compañeros. 

Isco y Lucas, de vuelta

El Real Madrid afrontará su segundo partido de la temporada y Zidane ya ha recuperado a dos jugadores que han estado de baja hasta ahora y que le ofrecen más posibilidades. Dos jugadores completamente diferentes y que hablan muy bien de las alternativas que tiene el galo en su plantilla. Además, son dos jugadores de su confianza. 

Isco durante el entrenamiento del Real Madrid

Isco y Lucas Vázquez han entrado en la convocatoria para el partido contra el Real Betis y ya estarán disponibles para jugar sus primeros minutos. El malagueño ofrecerá su calidad, su capacidad de asociación, de elaboración y su último pase. Juego a un ritmo más lento para controlar el choque, para esconder la pelota al rival y para encontrar huecos en espacios muy reducidos. Por su parte, el de Curtis es todo velocidad, llegada por banda y capacidad de centro para sus compañeros en una alternativa poco común en el fútbol actual, la del extremo a banda natural. 

Zidane dispone de muchas alternativas en la plantilla ya que todos los puestos se encuentran bien cubiertos, incluso en la defensa con hombres como Odriozola, Nacho o Militao, o en la portería con Lunin. En definitivas cuentas, Zidane sabe que las rotaciones son necesarias y por eso apostará de nuevo por ellas, porque él mejor que nadie entiende sus beneficios y su funcionamiento. El francés cree que ese es el plan para afrontar el inicio de liga y no correr el riesgo de sufrir demasiados traspiés que descuelguen al equipo de la pelea antes de tiempo y le obliguen a remontar a las primeras de cambio. 

[Más información: El Real Madrid, a despegar en Liga contra el Betis de Pellegrini]

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