2020 ha empezado con un sabor dulce para el Real Madrid. Los blancos han ganado la nueva Supercopa de España que se ha disputado en Arabia Saudí, redimiéndose del mal inicio de temporada y ratificando a Zidane, más que nunca, en el banquillo del Santiago Bernabéu. Sin embargo, ahora viene la parte más frenética de la temporada, con una cuesta de enero que deja sin aliento. 

Tras haber ganado al Atlético en la final de la Supercopa, los blancos llegaron a primera hora de la mañana a Madrid. Y es que no hay tiempo que perder para seguir preparando los partidos que tendrá que afrontar el equipo en las próximas semanas. Un Tourmalet que empezará en enero y no concederá tregua hasta el mes de marzo.

Este martes, con el sorteo de Copa del Rey, el Real Madrid tendrá que empezar a lidiar con tres competiciones de forma simultánea por primera vez esta temporada. Zidane tiene a la plantilla en forma gracias a la preparación física a cargo de Gregory Dupont, pero toda precaución es poca. 

Lopetegui, primer objetivo

Sevilla es la próxima parada del conjunto blanco en Liga. Casi nada. Julen Lopetegui volverá al Santiago Bernabéu 812 días después de haber sido destituido como entrenador del Real Madrid en 2018. Los hispalenses son uno de los equipos más complicados del campeonato y visitarán la capital a dos semanas del derbi madrileño. 

Sergio Reguilón, contra el Real Madrid EFE

Los de Simeone emularán a los sevillistas visitando el coliseo blanco, pero entre medias el Real Madrid tendrá que jugar en Pucela un encuentro, a priori, muy asequible. Aquí Zidane tendrá que hacer dote de su gestión de vestuario para no desgastar en exceso a los titulares. 

Esta precaución se debe a que febrero arrancará con el derbi ante el Atlético de Madrid, pero el mes terminará con la ida de octavos de final de Champions League ante el Manchester City. Los de Guardiola visitarán la capital para medirse al conjunto blanco en un partido de altos vuelos. 

Clásico, Guardiola y Osasuna

Será importante para Zidane rascar un buen resultado en casa para ir a Manchester, en marzo, con tranquilidad mental y sin presión. Sin embargo, no podrá despistarse en Liga, ya que antes de estos choques tendrá que visitar El Sadar, un campo siempre complicado, para medirse a una roca como Osasuna. Además, un necesitado Celta de Vigo y un Levante que cotiza al alza serán las otras piedras en el camino.

El Manchester United - Manchester City EFE

Aunque aún faltan siete semanas para el próximo Clásico, Zidane no pierde de vista el choque en el horizonte. El 1 de marzo, a 16 días de jugarse el pase a cuartos de Champions en Manchester, tendrán que recibir al Barça en el Santiago Bernabéu. Un partido en el que se pondrán sobre la mesa buena parte de las opciones por el título. 

Objetivo: recuperar lesionados 

El principal objetivo del equipo, al margen de sacar adelante todos los enfrentamientos que tiene por delante, será recuperar lesionados. Y es que la delantera está en cuadro, con bajas como Hazard, Benzema o Bale

Leo Messi y Karim Benzema, durante El Clásico REUTERS

En el club se espera que el belga esté disponible para el derbi ante el Atlético de Madrid, ya que lleva apartado desde el pasado mes de noviembre tras su lesión ante el PSG. Mientras tanto, Bale y Benzema aparecerán antes. 

En definitiva, hasta principios de marzo, el Madrid tendrá que afrontar tres partidos de Liga ante rivales de máxima entidad, uno de Champions ante Guardiola y lo que depare el sorteo del Copa del Rey. Un calendario apretado y de máxima exigencia. 

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