Francia es el país de moda en el Real Madrid. Hasta cuatro galos componen la plantilla del equipo blanco. Por no hablar de un cuerpo técnico con Zinedine Zidane a la cabeza lleno de preparadores del país vecino. Con eso, la mayoría de integrantes de esta nacionalidad pasa por un buen momento de forma justo antes de afrontar dos semanas más que trascendentales para los intereses madridistas en La Liga.

Pero los franceses que encabezan ese buen momento son dos. Raphael Varane y Karim Benzema forman parte de la columna vertebral de este equipo y fueron los líderes de la victoria del Real Madrid frente al Espanyol en el Santiago Bernabéu. Pero los dos fueron los mejores no solo por sus goles, si no también por su rendimiento y los otros nueve que están sobre el césped están notando que ambos están alcanzando sus cotas futbolísticas más altas.

No diga Karim, diga gol

El delantero está de dulce. Tras su mutación en goleador obsesivo, Benzema lucha por pichichi de La Liga con Leo Messi, el que le supera solo por un gol después de la actuación estelar del argentino de este sábado. Pero es que la influencia del francés en el juego va más allá si se mira la tabla de máximos asistentes. El delantero también está empatado con el astro del Barça a cinco pases de gol y solo les supera Rodrigo Moreno con seis asistencias.

Su gran forma no solo se reduce al campeonato nacional. En la Champions League estamos presenciando un bonito duelo con Robert Lewandowski por saber quién es el cuarto máximo goleador de la historia de la competición. De hecho, lo normal es que pasen también a Raúl González; el español acabó su carrera con 71 goles, Benzema suma 64 y el polaco 63.

El delantero del Bayern está haciendo una temporada increíble y ya suma 10 dianas en la máxima competición continental, mientras que el galo lleva cuatro en los cinco partidos que se han disputado.

Varane supera las dudas

El central no ha tenido la misma suerte de su compatriota hasta ahora. Varane ha tenido varios errores que han condenado al Madrid a algún mal resultado. El francés fue el gran responsable de que el PSG se metiera en el partido después de la exhibición del equipo en el Santiago Bernabéu y que, por ende, se empatase el encuentro.

A Zidane le estaba costando que sus dos centrales consiguieran encadenar varios partidos sin errores de bulto, pero parece que ese momento se acerca y qué mejor que hacerlo antes de dos partidos tan trascendentales como los de Mestalla y Camp Nou. La mejor pareja de centrales del mundo está cerca de regresar al nivel que el madridismo espera de ellos.

Para completar esta buena racha de los jugadores franceses, Zidane tiene una tarea pendiente. Ferland Mendy tiene que asumir los galones que hace falta para sustituir a Marcelo. El lateral fue expulsado ante el Espanyol y ha dejado un difícil papel para el entrenador francés para afrontar el encuentro ante el Valencia.

Ante la lesión del brasileño y asegurada su titularidad en el Camp Nou, el carrilero tendrá que estar a la altura frente al Barça si no quiere cargar con una cruz por el contraste con el rendimiento de Sergio Reguilón en el Sevilla y el dedo apuntando desde la grada por no cumplir con una apuesta de 48 millones de euros.

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