Gareth Bale ha sido el ojo del huracán del torrente crítico constante que rodea al Santiago Bernabéu. Esos vientos que siempre soplan intentando derribar la casa blanca, ya sea mientras el equipo va bien o cuando existe una mala racha. Nunca llueve a gusto de todos cuando se da la más mínima oportunidad de crear una polémica con un jugador que se ha equivocado en ocasiones, pero que también ha sido protagonista directo de los éxitos del club.

Este miércoles ha corrido como la pólvora una entrevista de Bale en Inglaterra, concretamente en la cadena británica BT Sports, donde ha enterrado cualquier polémica con respecto a su compromiso con el club y a la forma de encajar las críticas del público como pocos madridistas lo han hecho. Ha asumido, cual capitán, que todos los que visten la camiseta y defienden el escudo del Real Madrid están expuestos al examen semanal del aficionado y que lo único que pueden hacer es seguir trabajando para revertir los silbidos por aplausos.

Gareth Bale, sonriendo durante un entrenamiento EFE

Lección de compromiso

Bale sacó la bandera en la celebración con Gales por la clasificación para la Eurocopa para torear esos comentarios que se vertían tratando de enfangar las prioridades del futbolista. Pero todo se convirtió en una campaña para atacar el compromiso del jugador con el Real Madrid.

Si bien es cierto que la posibilidad de salir del club en verano ha sido un antecedente peligroso, desde el momento en el que se quedó Zinedine Zidane ha recalcado rueda de prensa tras rueda de prensa que su compromiso es intachable y su relación, como la que tiene con el resto.

A partir de eso, sus palabras en la televisión inglesa donde dice que el Santiago Bernabéu "es el mejor lugar para que te piten" son una declaración de amor al club. La transliteración de esa frase no es más que a cualquier jugador de fútbol le gustaría que le pitasen en ese estadio por vestir su camiseta un solo partido.

Gareth Bale y Sergio Ramos hablan con el colegiado Jaime Latre REUTERS

Remarcaba su declaración diciendo que lo único que puede hacer es "seguir trabajando duro" para demostrarle a la afición lo que es "capaz de hacer". Desde las estrellas más brillantes que han compuesto la galaxia Real Madrid hasta el satélite más pequeño han vivido en algún momento de su estancia en Concha Espina silbidos, más o menos merecidos. Y la mejor forma de transformarlos en ovaciones es esa, el trabajo diario y la consecución de éxitos.

Uno más del plan

Zidane cuenta con todos. Otro de los mantras que repite rueda de prensa tras rueda de prensa se aplica también a Gareth Bale. En el plan del francés de incluir a todos en la dinámica positiva para luchar por todos los títulos tiene en Bale un pilar fundamental. Un jugador de su talla, que ha sido tan imprescindible en los grandes éxitos recientes del club, pondrá su experiencia y su calidad al servicio de la plantilla.

El galés empezó la temporada siendo el mejor. "Va a ser el fichaje de la temporada", decían algunos. Y eso es lo que sigue pretendiendo el entrenador del Real Madrid. Sacar la mejor versión de Bale supone recuperar a uno de los mejores jugadores del mundo. Y, si antes se centraba el punto de vista en el futbolista, viéndolo desde el de Zidane, ¿a qué entrenador no le gustaría contar con alguien con las condiciones del delantero británico?

Las palabras de Gareth Bale en Inglaterra han supuesto más que un simple entierro de la polémica. Mientras se recupera completamente de sus problemas físicos, esto es un punto de inflexión para que la temporada vaya tendencia creciente. El galés ya ha elegido en ese dilema de estar con o contra el equipo. Se ha sumado al barco del que algunos le querían bajar. Y no desde la plantilla, solo hace falta ver un partido o un entrenamiento para ver la relación que tienen con Bale.

[Más información: Bale da la razón a los pitos que recibe en el Madrid y lanza un guiño a Mourinho y el Tottenham]

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