James Rodríguez es el protagonista del espacio Canal Otro, en el que rememora cómo fue su inicio en el mundo del fútbol hasta su llegada al Real Madrid en el verano de 2014. "Creo que el fútbol día a día te pone obstáculos que al final son sobrepasados", dice el jugador colombiano.

Sobre su niñez tiene un bonito recuerdo: "Tuve una infancia linda, en un barrio humilde. Cuando yo era niño siempre era fútbol, siempre pensaba en el fútbol". Campos de arena, en los que las botas no duraban mucho: "Eran botas que duraban muy poco porque siempre eran en campos de arena entonces duraban quince días y había que buscar la fórmula para comprar otras".

Solía jugar con niños mayores que él: "Mi primer club de fútbol... Tendría 6 o 7 años cuando entré en Academia, es ahí donde hice mis primeros entrenamientos y jugué mis primeros partidos. Siempre era el más chico -pequeño-, sí, pero era el que más jugaba, el que más goles hacía y el que más asistencias daba. Gracias a Dios siempre fue así".

Primer fichaje

Es en el Pony Torneo donde comienza a destacar, un campeonato importante en el que se comienzan a lucir las promesas del futuro: "Pony Torneo es un torneo al que van muchas personas, en el campo igual hay 8000. Da un poco de miedo con 12 años jugar ante tanta gente". "Con 12 años es súper complicado que alguien venga y te diga que te quiere comprar. Porque a los 12 años no sabes lo que va a pasar, cómo vas a crecer. Pero, obviamente, la decisión final fue que sí y ahí me compra el Envigado Fútbol Club. Ahí me quedé desde los 12 a los 16 años", recuerda.

Adiós a Colombia

Con 16 años hace las malestas para comenzar una aventura en el fútbol argentino: "Fue un cambio duro, un cambio drástico. Tenía 16 años, me acuerdo que los cinco primeros meses me fui solo. Lloraba prácticamente a diario porque estaba solo, porque estaba lejos de mi madre, de mis amigos... Todo el mundo piensa que es algo fácil y es algo duro".

James Rodriguez, con Colombia en la Copa América Reuters

En el Banfield le dirigió un Falcioni del que dice que fue como un "padre". "Él siente y sabe que yo tenía el talento para poder jugar y me da la responsabilidad con 18 años. Después de 113 años de historia salió campeón", dice un James que fue en el año 2014 cuando, tras jugar en Oporto y Mónaco, se convierte en el futbolista del momento durante el Mundial de Brasil.

Del Mundial al Madrid

Su gol en la Copa del Mundo fue su gran trampolín: "Cuando yo le pego, veo que se va el balón y que el portero de ellos toca, da al travesaño, entra y gol. Sientes que haces goles lindos y sientes algo lindo". De ahí a conocer el interés del Real Madrid en su fichaje: "Me dicen que posiblemente el Real Madrid esté interesado en mí y yo 'cómo no, claro que sí'".

James Rodríguez entrena en Valdebebas

El club blanco era su sueño de infancia y en su primera campaña en la casa blanca, James Rodríguez consiguió ser muy importante: "Ha sido el sueño desde que soy un niño. En el primer año en el Real Madrid pensé que no iba a jugar mucho, pero fue totalmente lo contrario. Hice 16 goles y 17 asistencias, algo así. Fue increíble".

El mediapunta cafetero sabe que el fútbol no es eterno y por eso su deseo es poder dar el máximo hasta el final de su carrera: "El fútbol es corto, hasta los 34 máximo, creo yo. Así que intentaré en estos años estar al máximo nivel y poder jugar bien al fútbol".

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