Gareth Bale ingresó en el terreno de juego en la segunda mitad del partido entre el Levante y el Real Madrid. 'El Expreso de Cardiff' hizo el segundo del conjunto merengue desde el punto de los once metros, tras el penalti señalado por falta a Casemiro. El galés no falló, pero sí que evitó cualquier tipo de celebración junto al resto de sus compañeros. 

Bale marca de penalti al Levante REUTERS

Una vez lanzado el penalti, Lucas Vázquez ha ido a abrazarse con su compañero pero el galés se le quitó de encima ante el enfado que pareció mostrar. Lo único que consiguieron algunos de sus compañeros fue chocar la mano cuando el '11' se dirigía al centro del campo. 

Antes del tanto del extremo, el equipo blanco empata a uno contra el Levante. Un resultado que en nada servía a un Real Madrid que había visto este mismo fin de semana como Barcelona y Atlético hacían sus deberes, contra Sevilla y Villarreal respectivamente, en la jornada 25 de La Liga. Ese gol de Bale suponía el ponerse por delante y estar más cerca de la victoria, pero eso no fue motivo suficiente para que el jugador lo celebrase.

El galés del Real Madrid lleva un año complicado. Solari no le da la titularidad que él considera que merece y sus apariciones en el equipo se suelen resumir a los minutos finales. Una influencia en el juego del equipo que el galés no está teniendo esta temporada. 

Lucas Vázquez, indiscutible para el técnico argentino, ha ganado la partida a Gareth Bale, que desde que salió de la lesión ha tenido un rol muy secundario en el conjunto blanco. 

Ante esta situación tan complicada, han aparecido en las últimas semanas rumores que apuntan a una posible venta de Gareth Bale. Manchester United y Chelsea se han interesado en hacerse con los servicios del galés. Los blues podrían aprovechar los contactos de Hazard para intentar la compra de Gareth Bale.

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