El Real Madrid está a la expectativa de lo que sucederá con Gareth Bale después de que este fuera denunciado por LaLiga por su celebración en el Wanda Metropolitano. El galés hizo una especie de corte de mangas, que no obtuvo una reacción crispada de la grada atlética. La sanción podría ir de 1 a 12 partidos según se entienda la provocación.

El caso está en manos del Comité de Competición que no se reunirá hasta la próxima semana. Carmen Pérez, jueza única, estará al cargo. Sin embargo, existe la posibilidad de que el cargo sea archivado o se quede en una multa económica. Existe un conocido precedente, el de Gerard Piqué en Cornellá.

El central del Barcelona fue protagonista el 4 de febrero del año pasado en el choque que enfrentó al conjunto azulgrana contra el Espanyol en La Liga. Este celebró el empate a uno en el 82' mandando callar al público de Cornellá y haciendo el gesto de unos cuernos. Una provocación que encendió al público del estadio.

El gesto de Gareth Bale durante la celebración

LaLiga denunció al Espanyol por los cánticos contra Piqué y el Barça y obvió los cuernos del central. Sí reflejó en su informe que Piqué provocó "realizando un gesto hacia el público colocándose su dedo índice sobre sus labios, en señal de silencio". "Su gesto de provocación hace que la gente reaccione y diga unos insultos que son intolerables", dijo Tebas tras aquel partido.

El Comité no sancionó a Piqué

En la nota informativa, LaLiga aclaró que "simulaciones claras o celebraciones de goles ofensivas que han ocurrido otras veces, que no son reflejadas en el acta arbitral, y que pueden generar crispación o que son contrarias al buen orden deportivo, siempre han sido rechazadas por parte de esta Liga, que no dudará, a partir de ahora, en dar traslado de las mismas al Comité de Competición para que depure las responsabilidades oportunas, mediante la incoación - si considera que existen indicios mínimos razonables de la comisión de una infracción disciplinaria-, instrucción y resolución del correspondiente expediente sancionador".

El Comité, de todas formas, archivó el caso y no hubo sanción. No se encontró motivo alguno para hacerlo y se tomó en cuenta el clima en el que se produjo. Competición sí se pronunció sobre las polémicas declaraciones de Piqué en zona mixta: "Las declaraciones del jugador no contribuyen a un modelo de prudencia y poco ayudan a consolidar el deporte como espacio externo de confrontación social. Más allá de si reflejan o no la realidad, pueden alimentar espirales de confrontación y prueba de ello es la denuncia del Espanyol, del ayuntamiento de Cornellà y de LaLiga".

Tebas y LaLiga cambiaron la norma y remitió su denuncia al Comité de Competición. El caso se repite, ahora con Bale como protagonista. Entonces no hubo sanción, pero el galés se enfrenta ante la amenaza de la LaLiga de sancionar a partir del 'caso Piqué' situaciones de este calibre. Es el último capítulo del enfrentamiento Tebas - Real Madrid.