Uno de los protagonistas del verano está siendo el ex del Barcelona. Después de lesionarse el pasado mes de febrero, Neymar llegó al Mundial muy justo y no pudo desplegar su mejor juego. Sin embargo, el internacional canarinho fue más noticia por sus presuntas simulaciones o exageraciones ante las muchas entradas que sufrió durante la andadura de Brasil en Rusia. Sobre todo ello ha hablado el propio jugador en declaraciones que recoge Goal.

Esta misma semana, el futbolista publicaba un vídeo el que se le podía ver mofándose de estas críticas. "Vi -los chistes- pero los tomé con humor, incluso he publicado en Instagram un vídeo con los niños al respecto", comenzaba diciendo la estrella del PSG. Al jugador se le puede acusar de exagerar, pero lo cierto es que los rivales castigan su característica forma de jugar a base de faltas. "Mi fútbol es driblar, enfrentar al oponente. No puedo pararme frente al rival y decir: 'Cariño, perdón, quiero marcar un gol'", afirmaba el futbolista, para continuar diciendo que eso es algo que no puede hacer que debe enfrentarse al adversario para luego "intentar algo" y que el rival no le deje irse.

LAS FALTAS DUELEN

El jugador del Paris Saint-Germain destaca por sus filigranas y también por su velocidad, por ello es víctima de numerosas entradas en cada encuentro que disputa. "Muchas veces soy más rápido de lo que creo, y el árbitro está allí para eso -para pitar las faltas", comentaba Neymar, quien aseguraba que "es doloroso", en especial "después de los partidos", sufrir tantas faltas. Para finalizar, el futbolista señalaba que "es complicado, pero nunca lo entenderás si no lo has experimentado".