Argentina fracasó de forma drástica en su debut en el Mundial de Rusia. La humilde Islandia logró sacar un punto más que merecido y con remontada incluida contra los de Sampaoli. Las críticas al técnico por su forma de gestionar el encuentro han sido numerosas y también ha habido algún que otro ataque a los jugadores. Uno de los más señalados fue un Messi que falló el penalti clave.

El delantero del Barcelona tiene una gran jerarquía en la selección y su palabra cuenta bastante. Por ello, las polémicas por la convocatoria de Sampaoli se han amontonado a los pies de 'La Pulga'. Dybala, sin ir más lejos, fue duda hasta el último momento por una supuesta falta de afinidad con Messi. Algo que él mismo ha desmentido en la última rueda de prensa dada ante los medios. "¿Reserva de Messi? Leo no tiene reservas, ni aquí ni en ningún otro equipo. Podemos jugar juntos y he ocupado varios puestos desde que jugué al fútbol, siempre sintiéndome a gusto", aseguraba.

Sin embargo, siendo delantero sorprendió que no entrara en esa primera jornada para cambiar el marcador. Una falta de liderazgo que no echa en falta. "Aquí estamos todos los protagonistas, cada uno en el papel que le toca. Tenemos al mejor jugador del mundo y tenemos que aprovecharlo", decía sobre Messi y su importancia. "Messi es el primero que quiere cambiar de marcha y dar marcha atrás. Todos estamos aquí para apoyarlo", zanjó. Unas palabras que dejan claro que tener contento al delantero culé es algo fundamental.