El Camp Nou disfrutó por última vez en un Clásico de Andrés Iniesta. El capitán del Barcelona se despedía de toda su afición marchándose por la puerta grande, como las auténticas leyendas. El esfuerzo del manchego jugando tocado el partido fue digno de elogio, quiso disfrutar por unos minutos del que sería su último enfrentamiento defendiendo el escudo culé contra el mayor rival del club azulgrana.

Sin embargo, el jugador de Fuentealbilla no pudo jugar todo el partido. En el banquillo se le pudo ver sufriendo como un aficionado más en la batalla campal que protagonizaron Real Madrid y Barcelona en el terreno de juego a pesar de que no se jugaban 'nada'. Aunque la rivalidad entre estos dos equipos estuvo vigente en todo el partido, una vez finalizado dicho encuentro, los jugadores blancos no dudaron en tener un bonito gesto con Andrés Iniesta.

LOS DETALLES DE LOS MADRIDISTAS CON INIESTA

Por una parte, el propio Zidane esperó a que Andrés Iniesta terminase la rueda de prensa para despedirse de él y desearle lo mejor fundiéndose en un emotivo abrazo. Sin embargo, esa no fue la única bonita imagen que se vivió en el último Clásico de la temporada. Sergio Ramos se llevó la camiseta del capitán del Barcelona y también compañero y amigo en la Selección. El camero, después de tantos años compartiendo con el de Fuentealbilla vestuario en el combinado nacional y siendo rivales en este tipo de partidos, le echará de menos en su nueva aventura en China.