Emre Can acaba contrato en junio y ha rechazado todas las intentonas del Liverpool para renovar su vinculación y asegurarse así la continuidad de uno de los jugadores más perseguidos en todo el viejo continente. Sin embargo, el internacional alemán está decidido a abandonar Anfield y son varios los clubes que se mantienen atentos a la decisión final del futbolista. Entre ellos el Real Madrid.

No fueron los blancos los primeros que se fijaron en Emre Can, sino que la Juventus lleva monotorizando sus movimientos desde hace largo tiempo. La Vecchia Signora ha sido el equipo que más ha intentado convencer al mediocentro germano, más que el propio Madrid o Bayern Múnich, pero según Tuttosport, las largas que el futbolista ha ido dando en las últimas semanas ha acabado por cansar y enfriar el interés de los bianconeri en él.