Zinedine Zidane está agrandando su leyenda en el mejor club del mundo. Para muchos ya era un ídolo cuando jugaba en el equipo blanco y dejaba a los aficionados deleitados con su visión de juego. El colmo fue aquel gol de volea que acabo en la escuadra y significó una Champions más para las vitrinas del Bernabéu. El francés decidió coger al equipo cuando peor estaban las cosas y nadie tenía las garantías de poder manejar a los jugadores en ese ambiente crispado en el que vivían. Zidane llegó y cambió la situación, las cosas salían, los jugadores estaban unidos y remaban en una única dirección.

TÍTULOS

En dos años como entrenador está viviendo una etapa de éxitos con tres títulos cosechados y con el equipo aspirante a ganar La Liga y la Champions League en la presente campaña. El primer título para Zidane fue la deseada Copa de Europa, su segunda vivida en el banquillo, aunque la Décima fue como segundo de Ancelotti. Tras este título el conjunto blanco, ha sumado una Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes, que le coronaba como mejor equipo del mundo en el año 2016. La ambición continúa en la entidad madridista que quieren más trofeos para el museo blanco. 

RÉCORDS

En dos meses desde la llegada de Zizou, los merengues parecían invencibles y se mantuvieron sin conocer la derrota durante 40 partidos, cuando en el mes de abril el Sevilla de Sampaoli conseguía la gesta de ser el primer equipo en lograr derrotar al Madrid. Algunos encuentros tenían situaciones en las que ningún equipo se hubiera levantado y hubiera sumado una derrota, pero el carácter que ha implantado el entrenador galo a sus jugadores ha hecho que se vivan esas remontadas de la era Capello, en la que se consiguió levantar el título liguero,

Además el potencial ofensivo queda reflejado en los 49 encuentros consecutivos que lleva el equipo anotando un gol en sus partidos, superando el récord que tenía el Barcelona en 44. Cristiano, Bale, Benzema, Morata, Sergio Ramos son jugadores que tienen talento para marcar diferencias en los partidos frente a los rivales. El legado de Zidane como entrenador no ha hecho nada más que comenzar.