El coronavirus sigue causando estragos en el mundo del deporte. Si en la Serie A ha provocado la suspensión de algunos partidos, y que otros se jueguen a puerta cerrada para contener la enfermedad, ahora también afectará al baloncesto. Y es que el brote de COVID-19, que salto a la esfera pública recientemente, sigue causando restricciones en los eventos deportivos que aglutinan a grandes masas. 

El partido entre Olimpia Milan y Real Madrid, previsto para disputarse el próximo martes en la ciudad italiana, se jugará a puerta cerrada con motivo de las medidas preventivas que se están llevando a cabo en el país. 

Durante el encuentro no podrá haber periodistas cubriendo la información deportiva como suele ser habitual cada jornada. La Euroliga solo permitirá la presencia de operadores cámaras y personal de realización para garantizar los servicios mínimos para la cobertura televisiva a través de DAZN, la plataforma que ofrece la competición. 

Real Madrid - Olimpia Milán Agencia EFE

El Olimpia Milan-Real Madrid no será el único partido de la semana que se jugará a puerta cerrada ante el brote de COVID-19 que ha causado estragos en el país. El Brescia-Reyer de Eurocup también tendrá que asumir estas restricciones para su celebración. 

El deporte italiano, en jaque 

El deporte italiano se ha paralizado en las últimas semanas a causa de la propagación del coronavirus por la zona norte del país. Ciudades como Milán son un epicentro de riesgo, en el que equipos de élite como el Inter de Milán ha tenido que seguir compitiendo a puerta cerrada hasta este fin de semana.

De hecho, ha sido en las últimas horas cuando ha visto realmente como el virus ha puesto freno a su temporada. Y es que este domingo se iba a jugar el 'Clásico italiano' de la Serie A entre Inter y Juventus de Turín en San Siro, pero finalmente ha sido aplazado hasta el mes de mayo. 

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