El Real Madrid de Pablo Laso ha comenzado como un cohete. El equipo merengue se coronó como campeón de la Supercopa ACB, para poco después comenzar con tres victorias en la Liga ACB y una en la Euroliga. Uno de los nombres propios es Randolph. El ala-pívot ha dado un giro radical a su situación: de no jugar en los momentos importantes de la final de liga frente al Baskonia a ser un pilar fundamental para el equipo. 

Este cambio de actitud, se debe en gran parte a su entrenador. Desde el primer momento defendió a su jugador y su deseo era que permaneciera en la plantilla para las próximas temporadas. Todo parece indicar que el jugador esloveno le ha querido devolver la confianza a su técnico con trabajo, puntos y defensa. Demostrando partido a partido que puede ser uno de los jugadores más dominantes del viejo continente. 

Con la ausencia de Ayón, la conexión Tavares-Randolph parece estar dando sus frutos. El de Cabo Verde pone la defensa y el '3' pone el espectáculo. Ambos han sido capaces de destrozar a Valencia y Unicaja con sus acciones combinativas e individuales. Randolph en estado de gracia se asemeja a ese '4' de la NBA que vive fuera de la pintura, pero cuando entra es para aportar positivamente. 

Randolph protege la bola ante la presión del defensor JuanJ0 Martin Agencia EFE

Su aportación ofensiva

Los primeros cuatro partidos de la temporada, sin contar los de Supercopa, han sido un manjar en lo que a puntos se refiere para Randolph. En todos ha superado los 10 puntos: 13 ante Tenerife, 14 frente el Valencia, 10 ante el Unicaja y 16 contra el Darussafaka. Con estos registros, el esloveno está en 13,25 puntos por partido. Su efectividad desde la línea de tres hace que su juego cada vez sea más peligroso y los rivales no tengan método para pararlo. 

Su mejora en defensa, clave para Laso

No todo se acaba con su aportación ofensiva. En defensa su cambio ha sido impecable. En temporadas anteriores su pasividad en varias fases del partido o sus faltas sin paciencia ha sido completamente eliminado. Se nota que su concentración en defensa está al 100%, aguanta los amagos y evita un contacto exagerado que pueda sacarle falta. Además se muestra más unido a sus compañeros que nunca, donde se sacrifica por ellos en acciones más físicas. 

Anthony Randolph hace un mate durante la final de la Supercopa ACB EFE

Titular en todos los partidos

Los inicios de cada partido son clave para el devenir del choque. El '3' ha empezado de inicio en todos los choques, quedando clara la confianza que hay depositada en el ala-pívot. No solo es partir de inicio, también suele acabar el primer cuarto sin visitar el banquillo. Puede ser el año de Randolph, curso donde demuestre su verdadero potencial, que mezclado con la calidad que guarda en su zurda, tiene todo a favor. El '3' vuela alto en Madrid y no tiene pinta de que se quiera detener.