Cuando todos daban por muerto al Real Madrid, el orgullo merengue conquistó el Buesa Arena. Los de Laso remontaron. Sufrieron y ganaron. El factor cancha vuelve a teñirse de blanco y el punto de campeonato lo tiene el cuadro capitalino. La presión, por tanto, es toda para Baskonia. Este cuarto partido tiene las claves marcadas y se prevé que el pabellón vasco sea una verdadera caldera.

EL TRÍO DEL TRIUNFO

Pablo Laso contará con tres jugadores que han mostrado un gran nivel en el último partido de la eliminatoria pero que también han dado la cara en el resto de encuentros. Principalmente Carroll y Tavares. El primero con su chorro anotador y el segundo con un potencial defensivo que ha sido fundamental para que el Real Madrid haya logrado parar a uno de los equipos con más potencia interior de toda Europa. Shengelia, Diop y Poirier han tenido múltiples complicaciones durante toda la final.

Ya en el último partido se repitió la historia. Tavares se fue a los cinco tapones, ocho rebotes y siete puntos para 12 de valoración, terminando como uno de los mejores jugadores del Madrid. Por su parte, Jaycee repitió esa racha anotadora en el perímetro que tantas alegrías ha dado a la entidad blanca. 15 puntos con un gran tres de siete en el triple para también 12 de valoración. Su racha final rompió los esquemas de baskonia.

Pero la gran sorpresa fue Doncic. No porque destacara, que es lo habitual, sino porque hasta el momento no estaba brillando como se esperaba frente a un rival como Baskonia. Doncic se desató con 20 puntos, nueve rebotes y tres asistencias. 29 de valoración que le convirtieron en un jugador imparable y con el protagonismo en los minutos en los que se resolvió el partido.

CONSIGNA MERENGUE

El Real Madrid tiene claro que no quiere despedirse de su afición. El objetivo es sentenciar cuanto antes la final. Levantar el titulo en terreno vasco y proclamarse campeón de una competición que el curso pasado se escapó contra todo pronóstico ante el Valencia.

Los de Laso tirarán de unidad como suelen hacer. En los partidos más complicados, en las situaciones más graves e inestables, el cuadro merengue ha estado más unido que nunca. Es una de las grandes pautas de esta plantilla y así se ha podido ver ante Panathinaikos, en la Final Four, o en esta misma eliminatoria que algunos ya veían imposible tras caer en el primer partido.

BASKONIA PREPARA EL INFIERNO

El cuadro vasco tiene claro que tiene que gastar su último cartucho. Sí o sí será su último partido en el Buesa Arena. Gane o pierda tendrá que despedirse de su afición, aunque lo único que falta por conocer es si con una derrota o con un triunfo. Para intentar alagar la final, en el Baskonia ya se mueve hasta viento y marea.

La polémica que no había existido hasta el momento lejos de la pista ha aparecido en la previa del cuarto partido. Marcelinho Huertas ha sido el encargado de encender la mecha. Criticar a los árbitros y señalar un favoritismo hacia el Real Madrid a menos de 24 horas de la gran cita. Presión para los colegiados que seguro que la afición impulsará durante el encuentro. Por el momento, tres técnicas pitadas al equipo merengue y solo una a Baskonia en todos los partidos de esta final. 

A este factor arbitral se sumará el de apoyo de la afición. Es una obviedad: la hinchada baskonista es de las mejores de Europa. Batieron récord de asistencia en el partido del domingo con más de 15.000 almas en el Buesa Arena y buscarán hacer valer la presencia de su afición.

BASKONIA - REAL MADRID

Baskonia:  Huertas, Beaubois, Timma, Shengelia, Poirier --posible cinco inicial-- Vildoza, Diop, Voigtmann, Janning, Garino.

Entrenador: Pedro Martínez.

Real Madrid: Doncic, Carroll, Causeur, Thompkins, Tavares --posible cinco inicial- Yusta, Taylor, Llull, Radoncic, Reyes, Randle, Rudy.

Entrenador: Pablo Laso.

Árbitros: Pérez Pizarro, Conde, Jiménez.

Hora: 21:00 horas (#0).

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada del playoff final de ACB que se disputará en el pabellón Buesa Arena (Vitoria).