No hay margen para la distracción. El Real Madrid sabe mejor que nadie que esto no está ni mucho menos que finiquitado. A lo largo del presente curso han sido varios los tropiezos que lejos de minar la moral de un equipo afectado por las lesiones, han hecho de este un portento en cuanto a despliegue de baloncesto en una cancha.

Y así lo saben los jugadores. La explosión de jugadores como Tavares, clave para frenar las acometidas de Calathes o Gist. La seguridad y conexión entre filas que proporcionan jugadores como Felipe Reyes o Rudy Fernández. Y por supuesto la mordiente arriba, Carroll, Randolph o Doncic deben de atinarse para desactivar a la bestia griega. 

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LECCIÓN APRENDIDA

Los de Pablo Laso ya saben lo que es naufragar estrepitosamente esta temporada durante la Euroliga. Cayó ante el Baskonia por 105 a 75 en un partido para olvidar. Si bien es cierto que esto se produjo en el peor bache de la temporada, los merengues consiguieron echar el resto para tratar de salvar el curso en Europa. Y lo consiguieron. Hoy son equipo de playoff tanto en Europa como en España.

De la misma forma han de afrontar el segundo envite de la serie. Pensar en que no hay más partidos más allá del próximo jueves. Salir a la pista como si de una final a partido único se tratara, con el beneficio inclusive de que ni hay rival externo a la eliminatoria cuyo juego pueda afectar en el devenir del encuentro. 

HORA DE LAS ESTRELLAS

Tras la tormenta llega la calma. No estará el 'Facu' pero sí Doncic, Rudy, Reyes, Tavares, Randolph... Esos jugadores que han hecho un mes de marzo tremendo y que ahora deben de seguir mostrando su mejor cara. Nadie duda de su valía. Pablo Laso confía en ellos para llevar la eliminatoria viva a Madrid.

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DONCIC, ÚLTIMA OPORTUNIDAD

Cuando el jugador esloveno juega para sí mismo el equipo lo nota. La aportación individual del base madridista repercute de manera muy directa en el equipo. Fuera distracciones, la NBA aún está lejos. Luka sabe que para tener opciones de optar a ese goloso primer puesto en el Draft, la consecución de una nueva Euroliga sería primordial.

Su capacidad de destrucción ya la conoce toda Europa. Suyo fue prácticamente el mérito de esta quinta plaza, que pudo ser cuarta, con aquel triple antológico ante el Estrella Roja en Belgrado. La historia puede repetirse el jueves en el OAKA. Sería histórico. Dos de las aficiones más ruidosas calladas por el poderío ofensivo de golden boy.

APAGAR EL INFIERNO GRIEGO

Pese a mostrar una ambición más calmada de lo que han solido procesando durante la temporada, los aficionados en el OAKA empujaron de principio a fin al Real Madrid. Hay que usar las armas propias. Carroll, Rudy y Doncic han de socavar la moral de una afición que se ha venido muy arriba tras el partido del martes. Queda mucho camino y el Madrid no ha dicho la última palabra.