
Mohammad Rasoulof. Foto: BTEAM Pictures
Mohammad Rasoulof, cineasta en el exilio: "Los movimientos de liberación en Irán deben mucho a la mujer"
Estrena 'La semilla de la higuera sagrada', película sobre un juez de instrucción que sospecha que su mujer y sus hijas le han robado su pistola en medio de disturbios políticos en Teherán.
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A Mohammad Rasoulof (Shiraz, Irán, 1972) le fue confiscado el pasaporte hace siete años. Fue entonces cuando decidió irse a vivir un tiempo a una isla al sur de su país donde descubrió un árbol “extraordinario”. Se trataba del ficus religiosa, un ejemplar cuyas simientes, trabadas en las heces de las aves, caen sobre otros árboles, a los que con el tiempo envuelven con sus ramas y terminan estrangulando para ocupar su espacio. El ciclo vital de la especie se le antojó una metáfora de la dinámica opresiva del régimen teocrático y misógino iraní.
Esta analogía le inspiró el título de su última película, La semilla de la higuera sagrada, que se estrena este viernes tras ganar el Premio Especial del Jurado en el Festival de Cannes, el del Público a la mejor película europea en el de San Sebastián y ser elegida para representar a Alemania en los Oscar.
El sociólogo y cineasta se exilió a Berlín al poco de terminar el rodaje de manera clandestina, ya que en 2017 el régimen iraní le había prohibido volver a ponerse tras la cámara. Sentenciado a ocho años de prisión y azotes, Rasoulof escapó a pie por las montañas durante una travesía de 28 días. Su largometraje revive “años de enfrentamiento con los servicios secretos y con la censura cultural” en el contexto de las protestas a raíz de la muerte de la joven Mahsa Amini mientras estaba custodiada por la policía de la moral por no llevar bien puesto el hijab.
Pregunta. Su película está protagonizada por un núcleo familiar conformado por un matrimonio y sus dos hijas. ¿Estuvo condicionado el género de la prole por el movimiento Mujer, vida y libertad?
Respuesta. Cuando empezaron las manifestaciones tras la muerte de Mahsa Amini, yo estaba en la cárcel. Dentro de la prisión de Evin tuve una experiencia muy rara y única: seguir lo que estaba pasando en la sociedad desde mi cautiverio. Oía que eran chicas jóvenes. A pesar de que ya sabíamos que las mujeres tenían un papel fundamental en la defensa de los derechos humanos en Irán, los hombres estábamos sorprendidos.
»Cuando al fin me liberaron, la única vía para entender lo ocurrido eran los videos anónimos en las redes sociales que la gente de a pie había grabado. Vi una masa de chicas jóvenes, muchas heridas, algunas muertas. Las imágenes de la valentía de estas niñas me resultaron muy inspiradoras. Los nuevos movimientos de liberación en Irán le deben mucho a las mujeres y las protagonistas femeninas le dan un nivel metafórico a mi película.
P. De hecho, en el metraje se ha servido de material de archivo real. ¿Qué criterio siguió para su selección?
R. Al menos hay tres vídeos de mujeres que han pagado con su vida. Se han convertido en recuerdos del sufrimiento, del duelo para mi pueblo.
P. La película empieza como un drama doméstico y evoluciona hacia el thriller. ¿Era su intención hacer crecer en la audiencia la conciencia política para luego trasladarle lo que viven las personas disidentes en su propio país?
R. Es exactamente esto. Cuando vives en un contexto de represión, la interiorizas, así que a un iraní la primera parte del filme puede no despertarle interés, porque conoce la situación, es su vida diaria. Pero para alguien que vive fuera de este sistema es una forma de comprender la experiencia de estar bajo un control permanente. Se trata de una introducción muy larga, pero la consideré un prólogo necesario para que los espectadores conocieran el contexto, porque si lo eliminas, no se puede entender hasta qué punto es sistemático este modelo en Irán.
Mirando a Kubrick
P. La trama arranca en el hogar como un espacio claustrofóbico y finaliza con una persecución amenazante del padre. ¿Se ha sentido influido por El resplandor?
R. Cuando estaba escribiendo el guion noté que la estructura se parecía mucho a la de la película de Kubrick, pero eso no me molestó, porque en la experiencia de seguir la evolución de la personalidad del personaje principal me interesaba entrar en el cine de género. Durante el visionado estamos en el tren del padre, seguimos su misma dirección.
P. La actriz que interpreta a la madre de la familia, Soheila Golestani, fue detenida por aparecer en un video de protesta sin el velo. ¿Influyó este arresto en el guion?
R. La única posibilidad para sacar adelante La semilla de la higuera sagrada era trabajar con gente que compartía mi visión y que miraba en la misma dirección. La mayoría de las personas que han formado parte de este proyecto, tanto mujeres como hombres, creían en el movimiento.
»Golestani, efectivamente, fue encarcelada y tuvo un papel muy importante en la difusión de Mujer, vida y libertad. La actriz que da vida a la hermana mayor, Setareh Malek, también tomó parte en las manifestaciones y le pegaron en la calle, y la que interpreta a la benjamina, Mahsa Rostami, es una chica muy valiente que estuvo involucrada en el movimiento y, cuando murió su padre durante la Covid, público un vídeo en el que hablaba con toda libertad.

Setareh Malek, Soheila Golestani y Mahsa Rostami, en un momento de la película
Una forma de conciencia
P. Precisamente por estar señalada por el régimen, a Golestani la participación en el rodaje le supondría complicaciones en su vida personal, ¿no?
R. Claro, le ha creado problemas, pero su elección personal responde a una forma de conciencia. Hablamos después y comprobé que sigue siendo una persona determinada y responsable. Cuando la han interrogado, ha estado muy tranquila, porque está segura de sus derechos como ciudadana y sabe enfrentarse a esta gente.
P. No es la primera película que rueda en la clandestinidad. ¿Qué supone proyectar películas de una manera convencional ahora que vive en el exilio?
R. Es un poco pronto todavía, porque por el momento estoy acompañando La semilla de la higuera sagrada, pero me interesa ver cómo voy a poder seguir contando mis historias en este nuevo ambiente y encontrar temas que todavía tengan que ver con mi pueblo y a la vez interesen al público europeo.