Image: En el corazón de Dora García

Image: En el corazón de Dora García

Exposiciones

En el corazón de Dora García

Vibraciones

15 septiembre, 2005 02:00

La lección respiratoria, 2001

MUSAC. Avda. de los Reyes Leoneses, 24. León. Hasta el 4 de diciembre

Con el título de Vibraciones Dora García (1965), artista castellano-leonesa radicada en Bélgica, resume los diez últimos años de una investigación artística orientada hacia el análisis de los comportamientos humanos ante diferentes emisiones sonoras. Sonidos que tienen capacidad narrativa, que secuencian tiempos y que posibilitan un ágil diálogo perceptivo y conceptual con los espectadores. Sin duda los diferentes escenarios visuales/auditivos dirigidos por la artista con la elegancia y limpieza de medios que le caracteriza no dejarán indiferente a nadie, ni a sus admiradores, ni a aquellos que por primera vez descubran sus propuestas de interacción artística.

El recorrido comienza con Quarry Jeans (2005), performance producida para la muestra, en la que un joven, a modo de feriante o charlatán publicitario, expone el contenido de la exposición, guiando al público por los diferentes espacios. Espacios en los que se incluye La lección respiratoria (2001), de la colección del MUSAC; una nueva y definitiva versión de Los muertos (presentada en Manifesta 2, en Luxemburgo, 1998), con mezclas sonoras ejecutadas por DJ Madel, y Lifetime soundtrack (1997).

La muestra se cierra con dos ambiciosos proyectos. Uno, el titulado Lo posible (2004), es un juego informático semejante al Si/No presentado en ARCO donde se ofrece un listado de cien cosas posibles representadas por el sonido que producen. Al cliquear en las palabras se incorporan o anulan estruendos, tañidos, chirridos, grujidos o algarabías, y cada visitante conformará un ambiente distinto de fragores sonoros a la carta.

El proyecto Heartbeaters.net, realizado específicamente para el MUSAC y para la ciudad de León desde 2004, arranca de una ficción mantenida en secreto hasta el momento. El argumento consistía en la supuesta existencia de una tribu urbana de adictos a escuchar el sonido de su corazón a través de unos auriculares. La página web creada al efecto enseguida logró adeptos que organizaron fiestas, estuvieron presentes en conciertos, editaron carteles e incluso fueron entrevistados en diferentes medios. Sin acuerdo previo varios grupos musicales leoneses grabaron un disco basándose en los latidos, que se dio a conocer por una falsa discográfica, Musique Camus (nombre encubierto del MUSAC). Y es ahora cuando se desvela el enigma de este fenómeno urbano -a través de todos los materiales generados desde el inicio- que, a partir de una idea inicial, se ha escapado del control de Dora García para crecer de manera independiente por derroteros insospechados. Como verdadero work in progress, en el sentido dado por Joyce en Finnegans Wake, cada involuntario actor de esta narración ha dado una identificación distinta a la trama original, permitiendo incluso una reflexión sociológica sobre la creación de paradigmas de comportamiento, la influencia de la música en la adolescencia y la necesidad de pertenecer a una identidad grupal o tribu.

En Vibraciones (título de una revista de culto musical de los setenta y ochenta) Dora García arranca de una observación detenida de los problemas individuales y sociales, explora los niveles perceptivos, emotivos y referenciales, asume obviedades para desfamiliarizarlas de una manera sorpresiva, busca tensiones psíquicas y físicas, fragmenta realidades, construye ficciones y dosifica lo extraordinario en lo habitual. En definitiva, nos introduce en un laberinto de sugerencias e ideas que están en la vida. En nuestra vida. Y, cómo no, también en el arte.