No ha sido un buen semestre para Prisa. La compañía ha reportado a la CNMV a última hora del martes sus resultados con un sabor agridulce. El editor sigue su camino hacia la refundación intentando sortear la crisis del sector, aunque con indicadores negativos. Las cifras indican que la compañía sigue en pérdidas al cerrar el primer semestre del año: en total 51,5 millones de euros.

El dueño de El País justifica estas abultadas pérdidas tras provisionar 40,8 millones de euros por el laudo que les enfrenta a Mediapro por la guerra del fútbol de hace una década y que les obliga a pagar 51 millones de euros, según la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid de abril de este año.

No obstante, si se elimina este impacto Prisa pierde 10,7 millones de euros, que se comparan negativamente con los 2,4 millones que ya perdieron en el primer semestre de 2018. En términos reales y excluyendo el efecto del laudo cifrado por la compañía en 40,8 millones, el editor multiplicó casi por cinco sus pérdidas en un año.

La respuesta se encuentra en la caída de sus ingresos y el efecto de las nuevas normas contables. El grupo reportó una facturación total de 572 millones de euros, un 8% menos respecto de los primero seis meses del año pasado. 

Aumenta la deuda neta

Hablamos en términos constantes, es decir sin el efecto de la depreciación de las monedas latinoamericanas, donde el editor tiene buena parte de su negocio. Si se incluye este impacto la reducción de los ingresos sería del 9,1%. Del mismo modo, registró unos resultados financieros negativos de 40,8 millones.

La buena noticia viene del lado de los gastos, que se redujeron en un 4,8% hasta los 472 millones. Con el impacto de las monedas el gasto se hubiese reducido un 5,8%. Esto se traduce en que el Ebitda, resultado bruto de explotación, llegase a los 100 millones de euros, esto es un 20,7% menos.

La deuda neta al cerrar el mes de junio de 2019 se situó en 1.180 millones tras el pago pendiente previsto a 3i (36 millones) y la recompra del paquete minoritario de Santillana (113 millones), frente a 929 millones de euros en diciembre de 2018. 

Por área de negocio, Santillana facturó 256 millones, esto es un 15,1% menos que igual periodo del año anterior. Del mismo modo, Radio ingresó 134,5 millones, un 1,1% de retroceso y Prensa que facturó 104,5 millones, un 4,6% menos.

Cambios en el consejo de administración

El grupo anunció además cambios en el consejo de administración. Maite Ballester sustituye a Francisco Gil, que fue designado en noviembre de 2017 en medio de la guerra por la salida de Juan Luis Cebrián. 

Ballester será consejera independiente (Gil era externo), y actualmente es consejera de Repsol, donde es vocal en la Comisión de Auditoria y en la de Remuneraciones. Es miembro del Círculo de Empresarios, del Instituto de Consejeros y Administradores (ICA), del Women Corporate Directors (WCD) y del Foro Internacional de Mujeres (IWF).