Comienza el curso y continúan las guerras internas entre las televisiones. Blas Herrero, dueño de la TDT DKiss, ultima los detalles de una demanda para impugnar los estatutos aprobados por la patronal de las televisiones, Uteca, el pasado 18 de junio. Según ha confirmado EL ESPAÑOL, la reprobación se presentará antes del 13 de septiembre, cuando expira el plazo legal para cuestionar esta nueva normativa.

Este marco normativo impulsado por Mediaset y Atresmedia, aprobado con el apoyo de Vocento y Trece, establece que los asociados de esta entidad no pueden pertenecer a “ninguna asociación equivalente y distinta y cuyos fines sean similares a Uteca”. Esta resolución abre la puerta a la expulsión de cadenas rebeldes críticas con el duopolio televisivo como DKiss.

Blas Herrero y Trece pusieron en marcha hace dos años la Asociación Española de Televisiones Privadas Digitales Terrestres, una patronal paralela a Uteca para defender intereses que no eran prioridad para la asociación controlada por Mediaset y Atresmedia. Desde esta nueva entidad las pequeñas TDT han criticado el reparto de la publicidad televisiva y han sido protagonistas de la investigación de la CNMC iniciada contra estos dos grupos por colusión.

Freno a las TDT rebeldes

Con la aprobación de estos nuevos estatutos, Mediaset y Atresmedia quisieron poner freno a las hostilidades y pacificar a una asociación que lleva al menos un año y medio en guerra. No obstante, este nuevo movimiento de Blas Herrero por lo que considera una restricción “al derecho de libre asociación”, continúa la lucha y mantiene las disputas entre las televisiones españolas.

Las fuentes consultadas por este periódico indican que la demanda que Herrero y DKiss presentarán ante un juzgado de primera instancia de Madrid denunciará la restricción al derecho de asociación, ya que los nuevos estatutos establecen la imposibilidad de crear una asociación distinta de Uteca, “apagando voces críticas e impidiendo que se denuncien asuntos como la anomalía publicitaria del mercado en España”.

De momento, el nuevo estatuto ha sido aprobado, pero no ha aplicado, por lo que tampoco se ha anunciado la expulsión de DKiss. Aunque su salida no está decidida, Atresmedia y Mediaset ya tienen los votos necesarios para expulsar a la cadena, como han venido amenazando durante los últimos meses. Frente a estas arremetidas, DKiss argumenta que los intereses de la Asociación Española de Televisiones Privadas Digitales Terrestres ya no son contrarios a los de Uteca, según se ha aprobado en su propia reforma de estatutos realizada en junio.

Renuncia de Alejandro Echevarría

Unos estatutos consignan solo dos ideas fuerza: la primera es la defensa de la equidad en el mercado publicitario contra la colusión de los operadores; y la segunda será defender el equilibrio en el pago del uso del espacio radioeléctrico a Cellnex donde las cadenas pequeñas TDT pagan lo mismo que las grandes pese a tener un 1% de su facturación. Dos objetivos que no colisionan con Uteca, ya que según indican en DKiss, fueron dos batallas que la propia asociación se negó a abordar.

Con todo, las cosas siguen revueltas en la patronal controlada por Mediaset y Atresmedia. La última reunión de Uteca fue antes del verano y todavía no se han reunido de vuelta del periodo estival. Las cosas no están del todo tranquilas, ya que la reunión programada para el 14 de septiembre fue suspendida sin nueva fecha.  

En su última reunión de julio, Alejandro Echevarría anunció su intención de abandonar la presidencia de Uteca antes del final de este año. Las informaciones confirmadas por este diario indicaron que Echevarría, que también es presidente Mediaset, argumentó desgaste personal para tomar una decisión que se hará efectiva en los próximos meses. Otro elemento de desestabilización de la patronal en medio de la guerra entre las rebeldes y los dos gigantes audiovisuales.

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