Los directivos de tres de los principales grupos de prensa españoles se han posicionado claramente contra la deriva independentista, en la primera de las tres jornadas sobre periodismo organizadas por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) y la Fundación Bancaria “la Caixa”.  

En el encuentro, el presidente de Unidad Editorial Antonio Fernández-Galiano, el consejero delegado de Vocento Luis Enríquez y  del grupo Zeta, Agustín Cordón, coincidieron en el que papel de la prensa en esta crisis "es reivindicar la verdad y convencer con la razón".

Para el presidente de Unidad Editorial, “en Cataluña no estamos viviendo una revisión del autogobierno, sino una revolución”. El consejero delegado de Vocento se preguntó “cómo hemos llegado hasta aquí” y aseguró que, después de convocar un referéndum ilegal, “Puigdemont no puede estar más tiempo como principal autoridad de Cataluña”. Por su parte, Agustín Cordón mostró su deseo de que no se produjera la inminente amenaza de declaración unilateral de independencia.

Pagar por noticias en internet

Los tres reivindicaron el papel de los medios de comunicación en esta grave crisis por la que atraviesa la democracia española y la necesidad de que los medios “replanteen la verdad y utilicen la información en contra de la propaganda", en  palabras de Enríquez. “Nuestra labor es ahora la misma de siempre pero también es más importante que nunca” añadió Cordón.

En la jornada los tres editores coincidieron en algunas soluciones para salvar la crisis del sector. La primera, pagar por “información veraz” en internet, una necesidad unánime, pero respecto de la que los grandes editores no toman todavía una decisión definitiva. La sociedad debe comprender la importancia de su función y pagar por “información veraz”, indicó Agustín Cordón, postura con la que mostró su acuerdo Fernández-Galiano.

Sobre las posible fusiones mediáticas, Fernández Galiano y Enríquez se mostraron totalmente partidarios, dado que éstas deberían proporcionar “músculo financiero” a las empresas, aunque, si como consecuencia se pierde la marca, “sería una mala noticia”, reconocía el consejero delegado de Vocento. Agustín Cordón apostó en cambio por una posible “agrupación” que permitiría a los grupos mediáticos llegar al mercado publicitario y aumentar su calidad “sin necesidad de fusionarnos”.