Marine Le Pen, presidenta del Frente Nacional (FN).

Marine Le Pen, presidenta del Frente Nacional (FN). Reuters

Macroeconomía Francia

La agencias de calificación alertan a Le Pen: su política económica acarrearía el impago de la deuda

Su ideario proteccionista se ha convertido en una preocupación para los inversores extranjeros.

11 febrero, 2017 01:51
París

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“La única divisa en circulación en Francia será nuestra nueva moneda francesa. Y la deuda será emitida en la moneda nacional”. Con esta declaración de intenciones, Marine Le Pen, presidenta del Frente Nacional (FN), se ha convertido en uno de los mayores riesgos de mercado.

Ni sus propósitos xenófobos, ni el empleo ficticio de uno de sus colaboradores en el seno del Parlamento Europeo, han acaparado tantas miradas ni levantado tantos temores como su política económica. Marine Le Pen y su ideario proteccionista, se han convertido en una preocupación para los inversores extranjeros que vaticinan un escenario funesto si Le Pen se hiciese con la presidencia de la República.

En su programa, la líder frentista no sólo propone la celebración de un referéndum sobre la salida de Francia de la Unión Europea, sino que promete la salida del euro. Una promesa que, de hacerse realidad, traería consecuencias trágicas para los mercados. La deuda francesa aumentaría automáticamente al ser emitida en “nuevos francos”; lo que llevaría consigo un inevitable impago de su deuda ante la incapacidad del país para afrontar tal carga financiera, sin olvidar la caída del valor del euro entre un 10% y un 20%. Todo ello podría acarrear la desestabilización generalizada de la moneda única.

De estas consecuencias se han hecho eco los inversores extranjeros, dado que el 60% de la deuda del país está en manos de bancos y actores institucionales con sede en la City de Londres, en Wall Street o en Hong Kong. Ante tal panorama, el periódico económico Financial Times dedicaba esta semana su primera plana a la líder frentistas: “Alrededor de 1,7 billones de euros de deuda pública francesa podrían eventualmente redenominarse en francos (…) lo que, según las agencias de calificación, supondría el mayor incumplimiento de la deuda soberana a nivel mundial.”

Sin embargo, esta amenaza de las agencias de calificación parece no calar muy hondo en Marine Le Pen que continúa alimentando sus propósitos en cada una de sus intervenciones públicas. “España, Italia, Grecia, están muriendo por la moneda única, construida en torno al deutschmark”, sentenciaba en la entrevista concedida el jueves 9 de febrero a France 2.

'Matar a Europa'

Mientras Le Pen parece poco preocupada frente a la advertencia de los mercados, la prensa gala se hace eco de este nerviosismo a nivel internacional. “El ‘riesgo Marine Le Pen” obsesiona a los mercados”, titulaba el jueves 9 de febrero el diario Le Monde, que ya había vaticinado un escenario caótico en su editorial “El proyecto del FN: matar a Europa.” Ante la idea de la implantación de la moneda soberana en 2017… “¿Cuál será la reacción de nuestros vecinos europeos con los que realizamos cerca del 70% de nuestro comercio exterior?”, se interrogaba el diario.

La inquietud de los mercados está justificada. Según los últimos sondeos, Marine Le Pen se situaría a la cabeza de la intención de voto en la primera vuelta de estas elecciones presidenciales. Con un 25,5% la líder del FN, se impondría a Emmanuel Macron (20,5%), y se alejaría aún más de quien hasta hace tan solo unas semanas era su principal rival, François Fillon (17,5%). Precisamente, para rebatir los polémicos propósitos de su adversaria de extrema derecha, el candidato de Los Republicanos, en un mitin celebrado en Poitiers el 9 de febrero, tachaba su ideario de "programa destinado a la quiebra económica".

Si bien la victoria de Marine Le Pen en esta carrera presidencial parece poco probable, los mercados financieros desconfían, ahora más que nunca, de que el panorama político no sufra un revés inesperado. “Hay una gran expectativa por parte de los mercados para entender lo que sucede en Francia. Los sondeos –que aseguran que Le Pen perdería en la segunda vuelta- ya no son suficientes para convencer”, resumía Olivier Vigna, director de estudios económicos del HSBC en Francia, al diario Le Monde.