Las compañías de construcción y servicios españolas no conocen el significado de la palabra desaceleración. Las seis grandes cotizadas (ACS, Acciona, Sacyr, FCC, Ferrovial y OHL) han presentado unos sólidos resultados en los nueve primeros de año marcados por el buen rendimiento de sus negocios en el extranjero donde, pese a los primeros síntomas de parón de la economía, han seguido mejorando sus resultados.

Entre todas ellas han conseguido facturar más de 48.000 millones de euros en los tres primeros trimestres del año, un aumento del 4% respecto al mismo periodo del año pasado. Además, de esta cifra el 77%, más de 37.000 millones, provienen de proyectos internacionales. 

Los buenos resultados en la ejecución de negocio se han visto refrendados en los beneficios de estas empresas. Si el año pasado el descalabro de OHL hizo que la suma de todos los beneficios tuviera un resultado negativo de 80 millones de euros, en 2019 las ganancias combinadas de las seis empresas superaron los 1.223 millones de euros. 

Al analizar su rendimiento individual, ACS, FCC, Sacyr y Acciona consiguieron cerrar este periodo en números verdes. La compañía presidida por Florentino Pérez fue la que más ganó formando, además, un aumentó de su beneficio de un 11% hasta los 769 millones de euros. Pero si una empresa se llevó la palma en este apartado fue FCC. La compañía disparó su resultado un 32% hasta los 233 millones de euros. 

En lo que tiene que ver con las empresas en pérdidas, Ferrovial sigue sufriendo a la espera de poder deshacerse de su división de servicios y acumuló pérdidas valoradas en 104 millones de euros. Pese a no llegar a números verdes, OHL redujo sus pérdidas drásticamente desde los 1.333 millones de los tres primeros trimestres de 2018 hasta perder sólo 10 en el mismo periodo de 2019.

Sólido crecimiento de la facturación

Un trimestre más, ACS fue la empresa que consiguió una mayor cifra de negocio. La compañía facturó más de 28.000 millones de euros, de los que 24.000 tuvieron su origen en el extranjero. Acciona fue la siguiente compañía que más facturó en este periodo, llegando a los 5.287 millones. Por su parte, Sacyr, al igual que en el primer semestre, fue la compañía que más aumentó su facturación en este periodo. La empresa presidida por Manuel Manrique pasó de 2.702 millones en 2018 a 3.032 millones en los nueve primeros , un 12% más.

El futuro de estas empresas parece gozar de la misma buena salud de hierro que el presente. Las seis grandes compañías cotizadas cuentan con una cartera de pedidos futuros que supera los 178.000 millones de euros en proyectos pendientes de ejecutar.

Una cantidad que supone un aumento del 6% si se compara con la cartera de pedidos que estas compañías comunicaron en septiembre de 2018. Una cifra que, por ponerla en contexto, representa el 14% del PIB de España, valorado en su conjunto en 1,2 billones de euros.

ACS marca la pauta en este apartado. La compañía aporta 77.584 millones al conjunto de la cartera, siendo Sacyr la siguiente empresa con mayor carga de trabajo futura con 42.616 millones de euros en proyectos pendientes de ejecutar. En lo que tiene que ver con el incremento respecto a 2018, ACS también lidera este indicador, con un crecimiento del 10,2% en comparación a septiembre de 2018.

Las compañías de construcción y servicios enfilan de esta manera un 2019 que va camino de convertirse en el mejor año para el sector. Un logro que tiene aún más mérito debido al complejo contexto internacional en el que se está consiguiendo. Pese a los cada vez más claros síntomas de desaceleración, el apetito de estas seis empresas no parece tener fin.

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