Ángel Ron sigue dispuesto a dar la batalla por su pensión del Banco Popular. Casi 13 millones de euros que, ahora, tendrá que devolver según el juez. El expresidente de la entidad recurrirá, y asegura que defenderá su gestión y su honor en los tribunales. 

Nadie duda ni cuestiona los derechos de Ángel Ron, pero sí se echa en falta algo de autocrítica en sus palabras. La caída y posterior resolución del Popular será analizada y juzgada por la Justicia, será entonces cuando sepamos qué ocurrió exactamente. Sin embargo, achacar la caída del banco a la estricta gestión de Emilio Saracho parece la opción más sencilla de cara a afrontar un proceso judicial. 

Sería de ilusos pensar que un banco como el Popular cayó estrictamente por una causa. Es cierto que la falta de liquidez le dio la puntilla, pero detrás de su resolución hubo mucho más, como dicen los distintos informes que se han ido conociendo. Alguna de ellas parece estar relacionada con la gestión de Ron. Los accionistas, a los que dice que defenderá, también merecen conocer de su boca en qué errores pudo incurrir durante su gestión. 

Allianz Compañía de Seguros y Reaseguros, la filial más importante en España del grupo alemán Allianz no tuvo un buen 2018. Los datos indican que se produjo una fuerte caída en su beneficio hasta los 51 millones de euros, un 41% menos que el año anterior. Un desplome que el equipo de Iván de la Sota, consejero delegado de Allianz para España, Portugal y Latinoamérica, achaca a las provisiones extraordinarias realizadas en seguros de vida-ahorro.

En verdad que en un contexto de tipos de interés en negativo, muchas compañías de seguros han tenido que reconocer pérdidas, porque muchos clientes contrataron productos que ofrecían un rendimiento alto que hoy es difícil de obtener, pero también es cierto que la mayoría del sector no ha registrado caídas tan pronunciadas en su beneficio.

Iván de la Sota se ha dedicado en 2018 a resolver el conflicto con el Santander, tras el fin del acuerdo para distribuir sus seguros en el Banco Popular, lo que les ha quitado el foco de otras prioridades como, por ejemplo, cerrar un acuerdo con un nuevo socio de bancaseguros para mantener los volúmenes de ventas y beneficios.

Un acuerdo que está tardando demasiado en llegar y que, de no concretarse, podría generar problemas para la compañía que actualmente tiene unos servicios centrales muy por encima de su actual estructura de oficinas, lo que es altamente ineficiente.