Los grandes almacenes estadounidenses de lujo Barneys New York han anunciado su bancarrota. "Como a otros en nuestra industria, la situación financiera de Barneys se ha visto dramáticamente afectada por el desafiante panorama de la distribución y los alquileres que son demasiado altos en comparación con la demanda del mercado", ha explicado Daniella Vitale, CEO de la compañía.

Tras declararse en bancarrota, Barneys espera encontrar compradores para varios de sus locales. De momento, continuarán abiertas sus cinco flaghsip en Nueva York, Los Ángeles, Boston y San Francisco así como sus tiendas online. Por otra parte, los grandes almacenes cerrarán cinco concept stores y siete centros comerciales.

"Durante más de 90 años, Barneys New York ha sido un icónico distribuidor especializado en lujo, con renombre por su corrección, con un fuerte punto de vista, creatividad y representación de los mejores diseñadores y marcas del mundo", ha añadido Vitale.

La bancarrota de Barneys llega varios meses después de la de Sears, otro gigante de la distribución estadounidense que no ha podido hacer frente a los cambios del sector. El retail está en busca de garantizar experiencias a sus clientes mientras hace frente a la irrupción del comercio electrónico.