No habrá fútbol en Vodafone el año que viene y por segunda temporada consecutiva. La operadora británica se mantiene en sus trece, e insiste en que le sale más rentable apostar por el cine y las series que pagar a Telefónica los derechos del fútbol. Así que con estos mimbres, la apuesta del equipo de Antonio Coimbra es clara: comprará a Movistar los paquetes de series y cine que ha ofrecido dentro de la oferta mayorista

Fuentes conocedoras de las negociaciones explican a EL ESPAÑOL que en Vodafone no hay nervios por la pérdida de líneas que se ha registrado en el último año. Al contrario, están convencidos de que apostar por las series y el cine les traerá réditos a largo plazo y, por supuesto, a un precio muy inferior al de LaLiga y la Champions League. 

El equipo de Coimbra está convencido de que rentabilizar los derechos del fútbol en estos momentos no es posible para ellos. Consideran que el sistema de compra, establecido por el regulador les perjudica y les obligaría a poner unos precios que serían inasumibles para sus clientes. 

En concreto, el cálculo de Vodafone es que el deporte rey les supone un coste de unos 240 millones de euros, mientras que todos los clientes que tenían el fútbol hace dos años no sumaban más de 200 millones en ingresos. Es decir, que perdía dinero, por lo que prefiere que todos esos clientes abandonen Vodafone a mantener una senda deficitaria en sus cuentas. 

Lo que ya tiene

Por tanto, parece claro que -salvo que cambien las condiciones- Vodafone seguirá sin fútbol. Así que durante la próxima temporada continuará manteniendo el paquete de Movistar Series, así como sus acuerdos con HBO, AXN y Netflix. A ellos les sumará a partir también los canales de Cine que comprará a Movistar dentro del paquete de oferta mayorista que ha puesto a la venta el operador de Telefónica. 

Se desmonta así la teoría que había surgido en las últimas fechas, y que hablaba de un cierto revuelo en las filas de la dirección de Vodafone sobre la necesidad de recuperar el fútbol para paliar la caída de líneas que ha sufrido la compañía en los últimos meses. 

Despejada la incógnita de Vodafone, está por saber qué hará a partir de ahora Orange. Debe descubrir sus cartas, aunque todo apunta a que el operador naranja mantendrá su apuesta por el deporte y comprará a Telefónica los paquetes de Movistar LaLiga y Movistar Liga de Campeones. Una compra que, según cálculos de mercado, llegará a los 300 millones de euros. 

Orange

Además, y gracias al cambio que Telefónica ha introducido al unificar el Partidazo y los ocho partidos de LaLiga restantes en un solo paquete, podría comprar también las series, que es otra de las patas fuertes de su oferta televisiva. 

De lo que haga la operadora naranja dependerá en buena medida la evolución de las ofertas de verano y, al mismo tiempo, de cómo será la ‘guerra del fútbol’ en las próximas semanas. Finales de julio y agosto son fechas clave para la venta de las suscripciones y, por tanto, del aumento de posibles líneas para los operadores. 

Noticias relacionadas