La junta general de accionistas de ACS ha dejado claro que la compra e integración de Abertis, cerrada durante 2018, ha supuesto un punto y aparte en la estrategia de la compañía. Esta adquisición permite a la empresa contar con la pieza que le faltaba a la hora de presentarse como una compañía capaz de afrontar el desarrollo integral de cualquier tipo de infraestructuras. 

En este sentido, durante la celebración de la junta ha trascendido que tanto el equipo directivo anterior de Abertis como los representantes de los nuevos accionistas de la empresa están ultimando los detalles de su nuevo plan estratégico. Se espera que en las próximas semanas, previsiblemente antes del verano, se presente.

En ese momento, tanto ACS, como Atlantia o Hochtief podrán realizar ofertas que contemplen el ciclo completo de una infraestructura. Desde su conceptualización o su construcción a una potencial explotación de la concesión o el mantenimiento, una vez se ponga en marcha. 

Si Abertis personifica el presente de la compañía, la energía renovable señala el campo en el que la empresa presidida por Florentino Pérez va a dar su próximo paso estratégico. Tras ordenar y unificar todos los activos que el grupo tiene en este sector, la compañía está ultimando la estrategia para Zero-E, la empresa a través de la que se va a enfocar este negocio.

En estos momentos, ACS está terminando de definir si opta por una salida a bolsa parcial o por contar con un socio que le permita comenzar con paso firme en este campo. En palabras de Marcelino Fernández Verdes, consejero delegado de ACS, el objetivo es terminar de definir este marco "a lo largo del año. A poder ser mejor en septiembre que en diciembre".

Marcelino Fernández Verdes, consejero delegado de ACS.

En su presentación, Fernández Verdes detalló los planes que ACS tiene para el sector energético. "Recientemente hemos creado Zero-E, empresa centrada en el desarrollo, financiación y gestión de proyectos energéticos renovables e infraestructuras eléctricas sostenibles. Actualmente contamos con una importante cartera de proyectos a desarrollar".

La empresa cuenta en este momento con 17 activos, tanto en fase de construcción como explotación, que suman unos 1.500 megavatios de energía renovable, 445 kilómetros de líneas de transmisión y otras infraestructuras de gestión de agua. "Adicionalmente cuenta con un potencial de más de 8,2 gigavatios de proyectos renovables en promoción de los cuales el 43% están en España, el 29% en Norte América, el 26% en Latinoamérica y el 2% en el resto del mundo".

ACS proyecta unas perspectivas muy positivas en el desarrollo de energía renovable. En este sentido, Pérez ha señalado durante su intervención en la junta que la compañía cuenta con una cartera de activos renovables en 2.000 megavatios. En cuanto a las posibilidades de crecimiento, el mandatario ha señalado que "tenemos más de 8.000 megavatios de energía renovable en promoción". 

Con respecto a las previsiones generales del negocio, la empresa de construcción y servicios es optimista de cara al 2019. En este ejercicio espera aumentar un 10% el beneficio apostando por mercados con potencial de crecimiento. El grupo tiene identificada una cartera de proyectos de concesiones de infraestructuras de más de 230.000 millones de euros para invertir en los próximos años.

De estos, el 35% están localizados en Estados Unidos, un 20% en Canadá, un 24% en Australia y un 21% en la Unión Europea. Las perspectivas macroeconómicas de estas regiones son positivas según el último informe del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Apuesta por la innovación

Fernández Verdes hizo especial hincapié en la importancia que la innovación ha tenido en el pasado del grupo y, sobre todo, tendrá en los próximos años. Para centralizar todos estos esfuerzos, ACS ha creado Nexplore, una entidad para el desarrollo del futuro digital del grupo.

"Los principales objetivos se centran en maximizar la eficiencia operativa, mejorar los sistemas de seguridad, optimizar la calidad de la ejecución, perfeccionar los sistemas de evaluación de riesgo y los procesos de toma de decisiones, así como ampliar las capacidades técnicas" ha señalado Fernández Verdes.

Hasta el momento, ACS ha desarrollado soluciones de software en tres áreas distintas: IOT, búsqueda cognitiva y blockchain. Del mismo modo, la compañía está desarrollando aplicaciones en el campo de las energías renovables, el transporte y almacenamiento energético o la movilidad.

Una apuesta que pone los cimientos de la ACS del futuro. Una empresa que apunta a aumentar su negocio más allá de las fronteras en las que lo ha realizado en los últimos años. El apetito empresarial, de cara al futuro, no solo no disminuye sino que sigue aumentando.