Por primera vez, El Corte Inglés ha lanzado una campaña protagonizada por sus empleadas. Siete mujeres, trabajadoras de distintos departamentos de los grandes almacenes, han sido escogidas para liderar la imagen de la nueva marca de moda femenina de los grandes almacenes: Woman. 

Una iniciativa con la que Nuño de la Rosa, presidente de El Corte Inglés, y todo su equipo buscan dar visibilidad a sus trabajadoras y ponen el foco en la importancia de la mujer. "Luchadoras, únicas, valientes" son algunos de los calificativos que emplean para definir a las nuevas representantes de la marca de moda de El Corte Inglés, y que resulta extrapolable al resto del colectivo femenino. 

La apuesta por sus trabajadoras es arriesgada por parte de El Corte Inglés, pero supone salirse de los canales habituales para hacer comunicación de moda. Renuncia, por suerte, a los estereotipos de mujer fatal, para representar una imagen normal, de las mujeres tal y como son en su día a día. 

Todo un cambio en la forma de comunicar de los grandes almacenes que, en los últimos meses, están arriesgando también en la forma de hacer publicidad. Además, con este tipo de campañas logrará también una mayor vinculación de los trabajadores con El Corte Inglés, algo que ha sido santo y seña de los grandes almacenes desde sus inicios.

Coca-Cola European Partners, la embotelladora de Coca-Cola, ha pegado un buen mordisco al mercado en Iberia (España, Portugal y Andorra) durante el primer trimestre del año. Sus ingresos suponen ya el 21% del total del grupo, igualando a la región del Norte de Europa, con 547 millones de euros, y por delante de Reino Unido, Alemania o Francia. 

La cifra total del grupo ha sido de 2.584 millones de euros, un crecimiento del 8,5% respecto al año anterior. Esto es fruto -entre otras cosas- de la buena climatología que hubo durante los tres primeros meses del año. 

La compañía que preside Sol Daurella, que aglutina a todas las embotelladoras de Coca-Cola en Europa, es el mejor termómetro para que la compañía de bebidas pueda adaptar su oferta a las nuevas necesidades de los consumidores. Un trabajo complejo, pero que parece estar dando sus frutos ya que de manera progresiva la compañía americana va logrando suplir la caída de sus productos azucarados por otros low-sugar. 

De hecho, Coca-Cola Zero y otros productos energéticos bajos en azúcar se están posicionando ya como parte de los más vendidos en la embotelladora. Un cambio que viene motivado por la necesidad de reducir el consumo de azúcar que se ha impuesto en la sociedad.