La guerra del Taxi, Madrid Central, la movilidad compartida, el 'coche fósil'… la movilidad se ha convertido en un tema de campaña electoral con muchos frentes abiertos. Por eso, las principales fuerzas políticas han incluido en sus programas para el 28-A cuáles son sus promesas en materia de movilidad.

Si en algo coinciden todos es que la movilidad, a partir del 28-A, debe ser sostenible y hay que poner en marcha medidas que así lo faciliten. El transporte público y el vehículo eléctrico ocupan también las propuestas políticas para estas elecciones generales.

Desde cambiarle el nombre al Ministerio de Fomento a firmar un Pacto de Estado por los Transportes y la Movilidad Sostenible. Así prometen los partidos afrontar los retos de la movilidad.

PSOE: Ley de Movilidad Sostenible

El partido socialista quiere repetir en el Gobierno. Si así lo deciden los españoles, el PSOE propone que el Ministerio de Fomento pase a llamarse Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana. Entre las funciones de este Ministerio, promover “tarifas competitivas en el transporte de ferrocarril de media y larga distancia, con el objetivo de aumentar en un 30% el número de pasajeros en este medio de transporte en 2025”.

El programa socialista también incluye la aprobación de una Ley de Movilidad Sostenible, así como un aumento en la inversión pública en seguridad y mantenimiento de las infraestructuras, que incluyan “la electrificación y digitalización de la movilidad”.

En cuanto a la circulación, el PSOE propone “establecer los 30 kms/hr como la velocidad máxima legal en las calles de un único carril de circulación por sentido” y regular el uso de los patinetes eléctricos, además de revisar los derechos y obligaciones de los peatones.

PP: un abono de transporte digital transnacional

El PP promete que si llega al Gobierno tras el 28-A impulsará la coordinación de todas las Administraciones responsables para que los ciudadanos, con un único título de transporte urbano, de carácter digital, puedan utilizar los medios públicos en cualquier ciudad española”.

Además, los ‘populares’ quieren mejorar la movilidad sostenible mejorando “los núcleos de transporte público nacional”. Motoristas y ciclistas también cobran protagonismo en el programa. El PP quiere impulsar “la creación de una red pública de vías exclusivas de uso para ciclistas", así como el despliegue para la “protección de los motoristas en todas las carreteras nacionales”.

En cuanto al vehículo eléctrico, los ‘populares’ tiene la intención de aprobar “una normativa que incentive el despliegue de una red de puntos de recarga de electricidad y gas para vehículos por todo el territorio nacional”.

Ciudadanos: Pacto de Estado por los Transportes y la Movilidad Sostenible

Los motoristas también aparecen en el programa de Ciudadanos. La formación naranja quiere aprobar un Plan Estatal de Sustitución de Guardarraíles para evitar accidentes mortales. Además, promete revisar la señalización e introducir “nuevas medidas de seguridad para acabar con los riesgos que sufren nuestros ciclistas”.

Por otra parte, Ciudadanos propone un “Pacto de Estado por los Transportes y la Movilidad Sostenible”, así como una evaluación para que “todas las inversiones estén justificadas por criterios de rentabilidad socioeconómica y no electoralistas”. Los de Albert Rivera prometen aumentar la inversión en la red de carreteras “para garantizar la máxima seguridad vial”.

Unidas Podemos: transporte público gratuito para los menos de 26 años

Unidas Podemos quiere “promover una movilidad urbana inteligente, de calidad y socialmente justa”, para ello, el partido incluye en su programa para el 28-A la mejora de la frecuencia de “las rutas de los servicios de movilidad pública”, así como medidas para ajustar su precio.

Podemos promete que si llega al Gobierno creará una tarjeta única de transporte gratuita para menores de 26 años además del “acceso gratuito a transportes colectivos de ámbitos urbano y metropolitano, comarcal, entre islas y provincial para menores de 26 años”.

La formación morada también incluye en su programa extender el modelo “de éxito de Madrid Central a otras ciudades con problemas de contaminación” para “atajar la contaminación del aire, que está acortando nuestra vida”.

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