Bugatti ha vuelto a superarse en su carrera por mantenerse como una de las principales marcas de coches de lujo del mundo. Su última proeza ha sido vender en el Salón del Automóvil de Ginebra que se celebra en Suiza, La Voiture Noire (el coche negro en francés) en la friolera de 18,9 millones de dólares o su equivalente en euros: 16,7 millones.

En realidad en comprador -que prefirió mantener el anonimato- pagó 12,5 millones por el coche y otros 6,4 millones de dólares en impuestos locales y al lujo. Lo sorprendente es que el bólido se vendió incluso antes de que se presentara al gran público, tras la tradicional retirada de la cubierta que le mantuvo oculto antes de su presentación oficial.

La venta de Bugatti convierte a La Voiture Noire en el nuevo coche nuevo más caro del mundo, un récord que hasta el momento ostentaba un Rolls Royce Sweptail, que fue vendido por 13 millones de dólares.  

Pero para récord, aunque en este caso de un objeto de coleccionistas, se encuentra el Ferrari 250 GTO de 1963 que ganó el Tour de Francia en 1964. Ese mismo año llegó en cuarto lugar en la clasificación general en Le Mans y es uno de los 36 que se construyeron entre 1962 y 1964.  Su precio de venta superó los 70 millones de dólares, 52 millones de euros.

Bugatti define a La Voiture Noire como un cupé con la comodidad de una lujosa limusina y el músculo de un hipercoche. Una interpretación moderna del legendario Bugatti Type 57 SC Atlantic, que celebra su 80 aniversario este año. Solo cuatro se hicieron ese auto y fue diseñado por Jean Bugatti, hijo del fundador de Bugatti, Ettore Bugatti, y hoy solo quedan tres.

"Estamos rindiendo homenaje a una larga tradición, a Francia y al trabajo creativo de Jean Bugatti", ha dicho Stephan Winkelmann, presidente de Bugatti Automobiles S.A.S, en un comunicado de Ginebra. "Al mismo tiempo, estamos transfiriendo tecnología extraordinaria, estética y lujo extremo a una nueva era".