Velas aromáticas, mantas aterciopeladas, tazas de todos los tamaños y colores suaves por doquier. Cuando el suizo Norbert Quiles abrió el primer Muy Mucho en los años 90 en Barcelona, no habría imaginado que hoy su sociedad principal, Muy Import SL, estaría facturando casi 13 millones de euros. "Muy Mucho es mono y barato", dicen desde la compañía. Y ese mensaje ha calado entre los clientes.

La suya permanece como una empresa familiar; desde 2002 está al frente de la compañía el hijo de Norbert, Stephan Quiles, que trabaja junto a su hermana Audrey, responsable de producto e imagen de la marca. No obstante, decidieron franquiciarla para poder seguir creciendo, de la mano de la consultora T4. Hoy cuenta con 82 tiendas, 10 propias (todas ubicadas en Cataluña) y 72 franquicias.

Crecer, como demuestran los datos, ha crecido. En dos años ha doblado su facturación, que en 2014 se situaba en 6,8 millones, según sus cuentas remitidas al Registro Mercantil a las que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. Su expansión la ha centrado casi toda en España (Madrid, Canarias, Galicia...), pero también ha conseguido tener presencia internacional. Los lugares elegidos: Francia, Japón, México, Canadá y Portugal. ¿Cómo? "Por visitas y recomendaciones de inversores de otros países interesados en nuestras tiendas", aseguran desde Muy Mucho.

A pesar de no ser todavía una gran empresa, como a todas, también le afecta la inseguridad jurídica que se vive en Cataluña, la tierra que la vio nacer. Por eso, Muy Mucho también está estudiando su cambio de sede social.

Franquiciados, entre 150 y 250.000 de inversión 

"Abrir una tienda Muy Mucho significa pertenecer a un grupo sólido que está en plena expansión", dice la marca a quienes quieren ser franquiciados. Su central de compras, Muy Import, es el único proveedor. El objetivo, dicen, es "facilitar el desarrollo del negocio de forma estable, desde una posición competitiva y sostenible a largo plazo". De este modo, controlan toda la cadena, y al prescindir de intermediarios pueden "ofrecer artículos exclusivos al mejor precio".

Desde la compañía se muestran satisfechos con los datos. "Cada una de las tiendas propias es una sociedad diferenciada, si consolidamos la facturación de Muy Import y las tiendas propias en 2016 ascendió a más de 18'7 millones de euros", aseguran. 

Los locales franquiciados, con entre 200 y 500 metros cuadrados, están ubicados en zonas exclusivas o centros comerciales. En Madrid, por ejemplo, la cadena está ubicada en las calles Gran Vía o Fuencarral; en Barcelona, en la Rambla o en el centro comercial Diagonal Mar. Ser franquiciado de esta compañía cuesta entre 150.000 y 250.000 euros, más un canon de entrada de 15.000.

La compañía catalana compite entre otras con la cadena del grupo Inditex especializada en interiorismo, Zara Home, referente en el sector. A cierre del ejercicio 2016, el grupo de Amancio Ortega contaba con 147 establecimientos de esta cadena, que nació en 2003. En esto último, en la edad, Muy Mucho lleva ventaja. Está por ver si consigue expander su crecimiento en tiendas tanto como para alcanzarla.