En apenas unos meses, Greta Thunberg se ha convertido en todo un icono del activismo ecologista. Su papel en la lucha contra el cambio climático ha traído consigo la atención sobre los grandes agentes que provocan la contaminación, entre ellos, el transporte, responsable de un 20% de las emisiones de CO2 en el mundo. No cabe duda de que es una de las industrias que contribuyen a estas emisiones a la atmósfera, en la que recientemente se está señalando, sobre todo al transporte aéreo

Sin embargo, la aviación solo representa un pequeño porcentaje del total del transporte en el mundo, ya que el de carretera sigue siendo el medio más utilizado. Al final, la aviación es causante únicamente de un 2% del total de emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera. 

Para obtener una imagen más completa de la responsabilidad de este sector, hay que tener en cuenta que el 80% de estas emisiones proceden de vuelos de más de 1.500 km, una distancia difícil de cubrir con cualquier otro medio de transporte. También se trata de un sector donde la sostenibilidad no parece estar muy cerca. Los aviones eléctricos están lejos de hacerse realidad y el uso de combustibles no fósiles es aún escaso. 

A pesar de ello, los aviones son cada vez más eficientes -un 80% más que los de los años 60- y la mayor parte de las compañías han puesto en marcha iniciativas para reducir sus emisiones y contribuir en la lucha contra el cambio climático. Entre ellas está Iberia, que ya ha comenzado a desarrollar varios proyectos de sostenibilidad en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

Una flota ‘eco’

El mayor compromiso de la aerolínea española es reducir sus emisiones un 20% para 2030 y alcanzar un balance cero de emisiones en 2050. Para lograrlo, se ha comenzado por la renovación de las flotas de largo, medio y corto radio por aviones mucho más eficientes. 

Iberia ha comprado 20 nuevos aviones Airbus350-900, seis de los cuales ya están volando, que emiten hasta un 35% menos que los aviones a los que sustituyen. También ha pedido 24 A320 neo, cinco ya volando, que reducen sus emisiones de NOX en un 50% y en un 16% las de CO

La renovación de su flota y otras medidas de eficiencia en cuanto a combustible y operaciones han permitido a Iberia reducir sus emisiones un 7,8% en los últimos cinco años y, así, ‘volar más limpio’, el lema que ahora emplea la aerolínea. No solo los aviones, ya que también ha modernizado la mayor parte de su flota motorizada de tierra, en la cual el 40% ya son vehículos eléctricos

Energía verde

Asimismo, Iberia se ha comprometido con la denominada energía verde, es decir, aquella producida de forma sostenible a partir de recursos naturales inagotables como el viento o el sol. Por ello, toda la energía eléctrica utilizada en sus instalaciones procede de fuentes 100% renovables

Adiós al plástico y al papel 

Al esfuerzo para la reducción de emisiones se ha sumado la guerra contra los plásticos de un solo uso, muy presente en cualquier actividad comercial hoy en día. Por ello Iberia ha eliminado los embalajes de plástico de mantas, artículos de higiene y auriculares. Otros productos, como las cucharas y removedores de plástico para las bebidas, se han sustituido por unos de bambú. La eliminación de estos plásticos de un solo uso ha permitido ahorrar 68,5 toneladas de basura al año

Por otra parte, de la mano de la tecnología también se está empezando a decir adiós al papel innecesario en los aviones. Hace tiempo que las tarjetas de embarque digitales se implantaron en el día a día de los aeropuertos, un formato sencillo y cómodo que permite ahorrar hasta 80 toneladas de papel al año. 

También han desaparecido las revistas y periódicos a bordo. Los clientes de Iberia pueden escoger entre más de 7.000 publicaciones para descargar en su smartphone desde la app de la aerolínea de forma totalmente gratuita. La sustitución de la prensa por este formato digital permite a la compañía ahorrar 640 toneladas de papel al año. 

Zero Cabin Waste

Continuando con el objetivo de minimizar los desechos generados, el proyecto de Iberia, Biogas Fuel Cell, ESCI-UPF, Ecoembes, Ferrovial y Gate Gourmet, LIFE+Zero Cabin Waste puesto en marcha en 2016 pretende reciclar los residuos generados a bordo durante el servicio de catering. Este nuevo modelo de gestión de desechos consiste en carros compartimentados que permiten separar los envases de plástico, latas y briks y los de papel y cartón de los restos orgánicos. 

Gracias a la separación previa en el vuelo, los residuos llegan diferenciados al aeropuerto, donde son clasificados por el tipo de material y reciclados. Este proyecto pretende recuperar el 80% de los residuos mediante el reciclaje y compostaje de los desechos orgánicos. 

Dentro de esta iniciativa también se pretende fomentar los hábitos sostenibles entre los empleados. Así, la campaña Personal Coffee Cup de Iberia ha habilitado la opción ‘sin vaso’ en las máquinas de café para empleados, de manera que éstos puedan utilizar sus propias tazas en lugar de los habituales vasos desechables

Estos recipientes tienen una vida útil de apenas unos minutos y tardan alrededor de 100 años en descomponerse. Además, su composición (cartón plastificado) impide su reciclaje. En el primer año de esta campaña, Iberia estima que se ha evitado el uso de 8.000 vasos: un total de 210 kilogramos de basura de los 400 kilogramos que se generaban anualmente.

La multitud de acciones que ya se están llevando a cabo para reducir los residuos, eliminar el plástico y acabar con las emisiones de gases de efecto invernadero ponen de manifiesto cómo la lucha contra el cambio climático se encuentra entre las prioridades de Iberia para los próximos años, así como su compromiso con el desarrollo sostenible del sector de la aviación.