Bayern Múnich y Wolfsburgo se medían en la jornada 25 de la Bundesliga. El equipo de Kovac necesitaba ganar para no perder la estela del Borussia Dortmund que derrotó al Stuttgart. El equipo bávaro goleó a su rival para recuperar así el liderato, pero la noticia estuvo en las calles. Varios ultras de cada equipo se pegaron en lo que fue una batalla campal.

50 radicales del Bayern y otros del Wolfsburgo se pegaron este sábado en una calle de Múnich en una pelea que estaba planeada: el número de personas, la hora y el lugar. Un auténtico bochorno que demuestra una vez más que los ultras no tienen cabida en el fútbol.