Paula Echevarría llevaba ocho años sin hacer cine. No por voluntad, sino por una agenda tan apretada que no le dejaba tiempo para hacer un paréntesis entre todas las series que ha ido encadenando. Tampoco le ha hecho falta para ser una de las estrellas de la industria española. La actriz tiene un imán que hace que cuando pisa una alfombra roja todos los focos se centren en ella.

Ese imán también la ha llevado en varias ocasiones al centro de la polémica por sus opiniones sobre el feminismo o por expresiones poco afortunadas en alguna entrevista. A pesar de eso, ella sigue contestando a todo con una sonrisa de oreja a oreja, y no tiene problemas en reconocer que como actriz ha sufrido todos los prejuicios del mundo.

Han pasado 18 años desde que empezó, y ni uno ha dejado de trabajar. Ahora regresa al cine con Gracia Querejeta y acompañada de Maribel Verdú y Juana Acosta en Ola de Crímenes, que llega a los cines este viernes y de la que ha hablado con EL ESPAÑOL.

Hacía mucho que no hacía cine, estaba siempre en series pero...

Por eso no hacía cine, porque han sido ocho años seguidos en televisión, con protagonistas muy protagonistas, rodando todos los días de lunes a viernes, con horarios imposibles… y era imposible compaginarlo, por eso he estado apartada.

¿Y cómo ha llegado este paréntesis?

Pues llega en el momento en el que paré de hacer Velvet, que hice una colaboración de dos capítulos con Movistar+, y ahí me llegó el guion y vi mi oportunidad. Todavía no tenía un proyecto que me gustara y me encajara en ese momento para televisión, porque si te digo la verdad en los ocho años anteriores es que no terminaba uno y ya tenía el siguiente, y me apetecía mucho y me subí a bordo.

Hasta hace poco había prejuicios con los actores de televisión que pasaban al cine.

Es que ha habido tantos prejuicios… los actores de tele en el cine, que si hacías publicidad era menos actor, que si tenías un blog eras menos actriz… parecía la profesión de los prejuicios. Y ahora, ya ves. Cuando yo hacía publicidad parecía la única, y ahora la hace todo el mundo. O los blogs, y ahora lo tienen Blanca Suárez, Úrsula Corberó, Kira Miró… todos han visto que cada vez todo está más mezclado. En Hollywood siempre ha sido así.

Parece que contigo ha habido todos los prejuicios.

Todos. Mira, llevo 18 años en esta profesión, siempre ejerciéndola, y nunca lo he dejado de lado, siempre lo he compaginado, pero por encima de todo soy actriz y nunca he estado sin trabajar.

Ola de crímenes está dirigida por Gracia Querejeta y las protagonistas sois Maribel Verdú, Juana Acosta y tú. Una película de mujeres.

Muy femenina.

Es la primera película de Telecinco dirigida por una mujer, podéis sacar pecho de ello.

Estamos muy orgullosas, mucho mucho, pero es para decir: esto es lo que está ocurriendo, es un avance. Que no quiere decir que ya no vaya a haber papeles para hombres, pero ya es hora de lo que equilibremos.

También has sufrido varios ataques en Twitter por declaraciones...

¿Cuál de ellas?

Tus palabras sobre el feminismo, ¿crees que fueron un error?

Mira. Llevo toda la mañana hablando con periodistas, y les digo, referente a la película, que es tan difícil hacer una comedia... porque está el club de los ofendidos que cada día tiene más adeptos y la gente tiene la piel fina. No se puede decir nada. Nuestros abuelos vivieron épocas más complejas y se reían mas de sí mismos. Parece que hay que opinar lo que ellos quieren, y si te sales del círculo ya van a por ti. Ayer lo decía precisamente, ¿cómo puede ser…? No sé, si tú como mujer yo hago unas declaraciones en las que no estoy acertada, las cuales reitero a día de hoy, porque siguen siendo mi opinión y no lo dije bajo ningún narcótico.

Soy lo suficientemente mayor para saber lo que digo. No sé si no se me entendió bien, o me exprese mal, pero era mi opinión. Yo quiero que se me califique como persona, no como hombre o mujer, eso no quiere decir que no sea feminista. ¿Tengo que decir la palabra eslogan? No, yo digo lo que pienso y ya está. Estoy a favor de la mujer, soy trabajadora, independiente, madre, amiga, pareja... soy muchas mujeres en una y soy bastante apoderada del movimiento femenino. Si tu eres feminista y crees que mis declaraciones no han sido apropiadas, pues entiende mi mensaje y no cargues contra mí.

No sé si crees que aunque se pide sororidad, contra ti se cargaron las tintas.

Claro, creo que hay mucha hipocresía también. Mira, yo veo mis redes sociales, veo los comentarios, y la mayoría de la gente, vamos un 99,9% de la gente que me ataca son mujeres, y estoy por apostar que la mayoría de ellas están en las manifestaciones feministas, así que creo que hay mucho descontrol.

¿Estas cosas te dan ganas de cerrar tus redes o tu blog?

No, porque tengo dos millones cuatrocientos y pico mil seguidores, y los que entran son ese pico mil. El resto, yo no pido que me alaben, pero que la crítica sea constructiva, no destructiva. Ofender por ofender, el insulto gratuito... no me da la gana, por ahí no paso, bloqueo y ya está. Intento no enzarzarme, porque crece la bola. Y eso es injusto, porque debería poder defenderme, pero al final no compensa. Pero yo no entraría en la red social de nadie a atacar. O no comento, o digo algo positivo, no me gusta la gente negativa.

Has hablado antes del humor, la película tiene cosas que pueden levantar alguna ampolla.

Es que… si tuviéramos que estar todo el rato pensando en lo que es ético, lo que es correcto y lo que no… y para quién, para qué gremio… pues es que no podríamos hacer cine, ni televisión, ni hablar. Es que ya ni en carnaval hay la libertad de disfrazarse de lo que te da la gana. Esto tiene que parar en algún momento porque nos vamos a volver tontos. El círculo de los ofendidos tiene que parar.

Vosotras tiene pinta de que os lo habéis pasado en grande.

Pipa, ha sido genial. Ha sido dura también, porque tenía acción, pero divertidísima.

¿Cómo es Gracia como directora?

Maravillosa. Tiene todo clarísimo cómo lo quiere, una seguridad brutal, y te la transmite, pero luego dentro de eso no se cierra en banda y te deja que opines, que aportes, te escucha. Crea en el set un ambiente que es una maravilla. Puede que haya tensiones, pero no se notan. Las habrá habido, pero no las ves. No te transmite ese estrés o ese mal rollo, al contrario. He trabajado con directores que si estaban tensos y que si oían una carcajada se ponían tensos, y no querían ni una risa. Gracia gritaba y decía: ‘Ehhh, que no os riaís sin mí, que no me entero. Le gusta que nos divirtiéramos. Que estuviéramos centradas, pero con momentos de ocio.

¿Repite con Garci?

De momento empiezo con Álvaro Fernández Armero una película dentro de dos semanas, una comedia para Telecinco cinema, entonces lo de Garci tenía que haber comenzado el año pasado y se ha retrasado, así que se solapa con esto y no sé si podré.

Garci fue uno de los primeros que apostó por usted.

Para mí hay un antes y un después de Garci, y personalmente le adoro, y me encantaría volver a trabajar con él, pero cuando me metí en el proyecto y le dije que sí, teníamos mucho tiempo por delante y justo ahora llega en el peor momento, porque tengo esta peli y una miniserie con Telecinco y no sé si voy a poder.