Los premios a veces tienen estas cosas. Uno se pasa toda la vida rodando películas, dando órdenes, colocando encuadres, ajustando planos y apareciendo, como hacía Hitchcok, en pequeños cameos, papelines y secundarios… Y a los 60 años van y te nominan como actor revelación. Hablamos de Fernando Colomo y de su película “Isla bonita”, un delicioso viaje emocional del cineasta a Ibiza que, pese a sus muchas virtudes, sólo ha cosechado una nominación: la suya.

“Es una sorpresa, porque quien esperaba que estuviera era Olivia Delcán -reconoce a EL ESPAÑOL el director y actor-. Lo mío ha sido muy sorprendente. Estoy contento porque por lo menos tenemos una presencia en la Goya”. En su tono, por teléfono, no hay reproches ni rencor. Las cosas son así. Los académicos han votado y la frescura y el desparpajo de la joven actriz, que lo acompaña en buena parte del metraje, no ha sido merecedora, aparentemente, de un hueco en esa terna. Tampoco su bella fotografía, su montaje, su dirección de producción, que hace mucho con tan poco… Sí, es una pequeña gran película.

Poca promoción

Colomo tiene claro que, “para la promoción que ha tenido esta película ya es muchísimo”. Y es que, explica, “tampoco hemos podido tener promoción porque está hecha sin ningún tipo de ayuda ni subvenciones. Aunque al final han entrado TVE, Canal+ y otros, no hemos podido hacer un lanzamiento, mandar mails… Todas esas cosas influyen”.

Y recuerda el cineasta lo “curiosos” que son los galardones de la Academia: “Gracia Querejeta estuvo en la terna finalista para el Oscar y de repente no esta aquí”. O al menos está de forma minoritaria también, como “Isla bonita”, con una única nominación. Aunque doble en el caso del filme de Querejeta: Nora Navas y Marian Álvarez competirán por el premio a actriz de reparto.

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Colomo parece estar tirando de ironía cuando cuenta que su candidatura le sirve para “salvar el honor, por lo menos. En esta película, al final tengo que hacer de todo”. Pero añade a continuación: “Aparecer de actor revelación por supuesto que me enorgullece: respeto muchísimo a los actores”.

Más de 30 papeles

Colomo tiene hasta 34 pequeños papeles “pero mis interpretaciones han sido en películas de amigos o amateur”, cuenta el cineasta, que se deja sin mencionar sus propios cameos. Pero la categoría de revelación reconoce a aquellos actores que son protagonistas por primera vez. Es su caso. Como ocurrió con Saturnino García en Justino, el asesino de la tercera edad (1994), Carlos Álvarez-Novoa en Solas (1997) o Walter Vidarte por La noche de los girasoles (2006).

Y ríe cuando se le pregunta si tiene ya la mente puesta en la gala del 6 de febrero de 2016. “Ganarlo me parece muy difícil. En esos cuatro contrincantes están Manuel Burque, mi amigo, con el he escrito guiones… Y gente muy buena, como el actor de A cambio de nada. Es muy complicado. No tengo ninguna opción, pero me doy por encantado con todo. Ojalá que sirva para ayudar a la película”.