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    El novio llegó conduciendo su coche deportivo

    El delantero pontevedrés no necesitó chófer para su gran día. Él mismo condujo su automóvil hasta el lugar de la ceremonia, pero en el vehículo no iba solo.

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    Atento a la madrina

    El deportista llegó del brazo de su madre, María Juncal González. Madre e hijo conjuntaron sus estilismos. Ella lucía un vestido fluido en gris -con tocado de plumas incluido- y el futbolista mostraba una ancha corbata del mismo color.

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    Un boda sin hacer ruido

    Este enlace poco tuvo que ver con la gran boda de Pilar Rubio y Sergio Ramos. Lejos de parques temáticos y una lista de invitados infinita y llena de vips, Iago y Jennifer optaron por una celebración más íntima, en mitad del campo y con su círculo más cercano.

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    Problemas para la novia

    Y llegó la novia. Lo hizo en elegante coche negro del que al salir tuvo varios problemas con su vestido. La tela del tul tiene sus peculiaridades y no siempre es fácil acertar cómo empezar a caminar.

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    El viento y las transparencias, enemigos íntimos

    El vestido de la novia escondía varios trucos, pero no quería desvelarlos hasta después de la ceremonia religiosa. Por eso, a su llegada, intentó taparse lo máximo posible pero las condiciones climáticas se lo impidieron al dejar a la vista la totalidad de sus piernas.

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    Inocencia y colores pastel

    Jennifer Rueda parecía estar sufriendo con la correcta colocación de su pomposa falda, pero al encaminarse hacia la zona de sus familiares enseguida lució una sonrisa. Lo hizo con su melena ondulada al viento y un ramo de flores en tonos rosados, lilas y salmón.

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    A lo alto de la colina

    Los novios aprovecharon el hermoso paisaje verde de Galicia para celebrar su amor. Hasta una zona despejada y rodeada de vegetación subieron a los invitados para ser testigos de su 'Sí, quiero'.

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    Vestido desmontable

    En esta boda no hubo prohibición de uso de teléfonos móviles y gracias a ello se ha podido desvelar el gran misterio del traje nupcial de Jennifer: tenía falda desmontable. Para la ceremonia usó una voluminosa capa de tul con cola en su vestido, pero para estar más ligera en la fiesta posterior, decidió prescindir de tanta tela y bailar cómoda junto a sus invitados y su ya marido.

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    El momento del 'Sí, quiero'

    Su historia de amor acumula ya muchos años, pues se conocieron en su juventud y junto han creado una familia con la llegada de sus dos retoño: Thiago (2 años) y Mía (7 meses). Por lo que su unión para destinada a cumplirse hasta el fin.

A.O.