Begoña Gómez (43 años), esposa de Pedro Sánchez (46), se ha convertido en protagonista involuntaria de la semana informativa. No solo a nivel político sino también institucional. Hace unos días, se conocía la noticia de que la esposa del presidente del Gobierno se tomaba una excedencia de un año de su puesto de la empresa Inmark Europa donde ejercía de directora de consultoría en externalización comercial. Ahora, Gómez ha fichado por el Instituto de Empresa (IE) centro en el que ocupará el cargo de directora del Africa Center, y "que impulsará la innovación, el liderazgo ejecutivo, el emprendimiento y el desarrollo de proyectos de acción social en el continente africano".
Al frente de una nueva vida pública, su imagen será estudiada, analizada y desmenuzada al detalle. Así pues, ¿cuál es el estilo de Begoña Gómez, la 'segunda dama' de España, a ojos de un experto? ¿Acierta en sus actos públicos? ¿Qué terrenos de moda debería 'explorar' para llegar a ganar la batalla (estilística) a otras esposas de presidentes como Melania Trump (48) o Brigitte Macron (65)?
Para conocer en profundidad y con opinión crítica avalada la evolución estilística de Gómez, este periódico ha contactado con Cristina Rodríguez, figurinista de cine y nominada a los premios Goya por Mejor Estilismo hasta en cinco ocasiones, Ana Iriberri de aiasesoresdeimagen, y Belén Rastrollo, experta en moda y estilista de celebrities.
En palabras de Cristina Rodríguez, "la veo clásica. Y fíjate que es guapa, tiene buen cuerpo y buena figura pero la encuentro anodina. Ella podría ser un icono de moda, aunque eso de 'icono' es una chorrada, pero podría llegar a ser un referente. Creo que debería ser más 'cañera'. Además, eso es lo que vende ahora el Partido Socialista, que está intentando mostrarnos paridad, igualdad entre hombres y mujeres... Begoña debería dar un paso adelante". La estilista además subraya que la esposa de Sánchez "tiene un pelo bonito y hace poco vi unas imágenes suyas con el pelo así como suelto... Pero debería poner más volumen porque al final tengo la sensación de que con ese aspecto intentan ser tan comedidas que no cuentan quiénes son. Es interesante que haga lo que hacía Michelle Obama, que era tipo "aquí estoy yo": ir a programas de televisión, una tía que 'chula' en contra de la obesidad infantil, siendo ella una mujer grande. Me gustaría más eso. Me gusta la gente imperfecta, que un día va mal vestida, que un día sorprende. Me gustan sobre todo las mujeres que tienen algo que decir. Y creo que Begoña tiene mucho que decir".
Bajo el criterio de Iriberri, "si hasta la fecha los estilismos de nuestra 'primera dama' se han caracterizado por ser poco arriesgados y más bien de un perfil bajo, en el que el negro y blanco, así como el rojo eran claros dominantes, estamos convencidos de que su estilo va a ir evolucionando poco a poco. Va a asumir un papel más protagonista en este sentido que sus dos antecesoras en la Moncloa. Ya la hemos visto presente en la Fashion Week madrileña, y apoyando directamente al sector moda español, algo que nos puede hacer ver su interés por la moda. Además añade, "en sus últimas apariciones vemos cómo va realizando pequeños guiños a las tendencias, y asumiendo pequeños riesgos frente a los estilismos más clásicos y lineales que había lucido hasta el momento. Begoña posee una figura fácil de lucir y que puede dar mucho juego en este sentido, por lo que es casi seguro que con el asesoramiento adecuado y la personalidad que hasta la fecha ha mostrado (son muchos los que la identifican como pieza fundamental del tándem que forma junto a Pedro Sánchez) podamos ver una evolución en su imagen personal".
Como conclusión, en palabras de la estilista Belén Rastrollo "su estilo no ha evolucionado mucho y es bastante clásico. No tiene un estilo definido. Por su posición, estaría bien que lo definiesen para ser un poco referente. Ahora, de alguna manera, es influyente. Siempre lleva el mismo hairstyle... Las prendas que elige son correctas pero no son las mas favorecedoras para ella. La apagan un poco. Es una mujer que trasmite personalidad pero no la expresa con su imagen (hablamos puramente de estilo)." Y continúa, "tiene un gran potencial y me recuerda mucho a Caroline de Maigret cuyo corte de pelo y estilo podría ser muy acertados si lo aplicamos a la fisionomía de Begoña y sus facciones. Le darían frescura, irían mas acordes con lo que trasmite, seguramente la haría mas joven (no digo que parezca mayor). En resumen, me parece una mujer que podría ser un buen referente de estilo, realmente sólo necesitaría un par de cambios, entre ellos el pelo que es algo que da esencia a la imagen de las personas y las define".
La figura de la 'primera dama'
Cabe destacar que la figura de la 'primera dama' no existe como tal en España. Al vivir bajo un régimen de monarquía parlamentaria, el puesto de 'primera dama' lo ostenta la Reina, en este caso, Letizia Ortiz (45). Desde Sonsoles Espinosa (56) no se ha lucido en nuestro país la siempre relevante presencia de la first lady. No existe y quizá haya que reivindicarla. En Francia, los galos aplaudían los vaivenes de la otrora cantante alternativa y modelo de los noventa, Carla Bruni (50), al lucir toda la artillería pesada de la casa Dior from head to toe, pasando por el dedo anular. Inolvidable es el anillo de rubíes en forma de corazón ('Cupidon') diseñado por Victoire de Castellane para Dior Joaillerie con el que Sarkozy (63) quiso sellar su amor eterno con Bruni.
En Estados Unidos, Michelle Obama fue un coloso contra la obesidad infantil y puso a bailar a todos los niños de América a ritmo del Get me bodied de Beyoncé (36). Incluso fue capaz de hacer una aparición estelar con Ellen DeGeneres (60) en su magazine televisivo o marcarse una sesión de Carpool Karaoke con James Corden (39) a lomos de su coche por Beverly Boulevard. Begoña Gómez, con su recién estrena 'presidencia', aún tiene mucho por brindar y mucho por demostrar.
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