Rocío Osorno (31 años) ha vuelto a utilizar su arma más potente, su cuenta de Instagram, para desvelar a su millón de seguidores uno de los grandes secretos del mundo de la moda: qué color reinará en los armarios de todos en los próximos meses.

En un nuevo ejercicio fashion, la influencer sevillana ha publicado al mismo tiempo que otras grandes firmas internacionales como Givenchy o Louis Vuitton, un vestido de su marca adelantando el otoño con el tono de Pantone que predominará en las pasarelas, y a continuación, en las calles.  

Osorno ha seleccionado una pieza de su firma (Rocío Osorno Costura), en concreto el modelo María, y lo ha revestido de verde esmeralda. Se trata de un vestido con corte a la cintura, largo midi en tul de plumeti y cuyo color original era rojo vivo. Ahora, según promociona la propia it-girl, también hay un nuevo tono en el que poder adquirir la prenda. 

Rocío Osorno ha optado por la sobriedad y su vestido verde esmeralda lo ha combinado con un bolso metálico de Zara y unos stillettos de Jimmy Choo. El clutch es una caja de color oro con cuerpo metalizado y detalle de borlas metálicas con cadenas laterales. Tiene, además, asa de hombro en cadena, interior forrado y cierre mediante pieza con detalle de metacrilato. Los zapatos son una restauración del clásico modelo Love 100 de Jimmy Choo: unos salones de tacón con encaje de chantilly y el extremo en punta de cuero. 

Efectivamente, la empresaria andaluza prevista de la invasión de verde que estaba a punto de llegar, se ha sumado a la estrategia de grandes casa de lujo a nivel global que ya están exhibiendo sus prendas en ese tono esmeralda. Por ejemplo, Clare Waight Keller (48), la directora creativa de Givenchy, acaba a mostrar las primeras imágenes de Ariana Grande (26), nueva embajadora de la maison francesa, con un tuxedo de dos piezas en verde esmeralda. Todas estas prendas están englobadas dentro de la colección #ARIVENCHY.

El aterrizaje del verde esmeralda demuestra una vez más que en moda todo vuelve y todo es cíclico. Pantone hizo oficial en mayo de 2013 que el color del año era precisamente ese, algo que vuelve a suceder apenas seis años después. Un momento en que algunas casas de lujo como Gucci se apresuraron en combinar este color con otros como dorado o tonos que bailaban entre el fucsia, el magenta y el púrpura.

Y aunque a priori el verde esmeralda resulte de difícil combinación, muchas influencers lo han llevado con lavanda, conocido en el argot de moda como el millennial pink. Esa mezcla de colores, anunciando la inminente llegada del otoño de 2019, ya ha inundado las calles de París, Londres o Nueva York. La mezcla de portar en tu atuendo colores vivos en estaciones donde ya caen las hojas, empieza a llover y oscurece antes, resulta una opción más que apetecible. 

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