
Melania Trump, en una imagen de 2020.
Melania Trump busca el cariño de los estadounidenses en su regreso a la Casa Blanca con una imagen independiente y austera
Este lunes, 20 de enero, tendrá lugar la investidura de Donald Trump. Así, oficialmente, la exmodelo volverá a ser primera dama.
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Vuelve la era Trump. Y con ella, Melania (54 años). Una etapa ya conocida, pero que trae consigo nuevos proyectos. La exmodelo eslovena publicó un libro autobiográfico el pasado 8 de octubre y a finales de este 2025, llevará la historia a Amazon Prime. Un gran paso en su proyección pública, que podría mermar con la imagen fría y distante que proyectó en el anterior mandato de su marido.
"Mi primera prioridad es ser madre, ser primera dama, ser esposa, y una vez estemos dentro el 20 de enero, servir al país", comentó la mujer de Donald Trump (78) el pasado día 13, en una entrevista con el canal Fox, con motivo del documental que prepara y en el que expondrá su vuelta a la primera línea de la política.
Sincera como nunca, Melania Trump confesó que en el anterior mandato de su marido sintió que "la gente no la aceptaba". Pero está convencida de que esta transición "será muy diferente". Regresa a la Casa Blanca este lunes, 20 de enero, exactamente cuatro años después de que saliera de la residencia presidencial. Cabe recordar que un día como este, pero en 2021, la exmodelo 'recuperaba' parte de su ansiada libertad.

Melania Trump, en un acto en Washington en 2020. Gtres
Aunque entonces se despedía con un emotivo mensaje, su enorme sonrisa dejaba claro su felicidad por dar inicio a una vida alejada de los focos. Desde entonces fueron muy pocas sus apariciones públicas. Melania se refugió en Mar-a-Lago, la lujosa mansión de Donald Trump situada en Palm Beach, Florida, y apenas se tuvieron noticias de ella.
Ahora, en una suerte de déjà vu, experimenta un cambio a la inversa. Pasa de la discreción a la vida pública, como primera dama de Estados Unidos. Eso sí, de una manera distinta y, a juzgar por sus recientes declaraciones, con mayor ilusión.

La pareja presidencial celebrando su victoria. Reuters
"Quizás la gente no me aceptaba, no me entendía como quizás hace ahora. No tuve mucho apoyo. Algunos quizás me ven solo como la esposa del presidente, pero me levanto sola, soy independiente, tengo mis propias ideas y mis síes y noes. No siempre estoy de acuerdo con lo que mi marido dice o hace, y está bien", expuso la exmodelo, siguiendo la línea que muestra en su biografía. En su libro, cabe puntualizar, se muestra a favor del aborto, una postura opuesta a la de su marido.
"Yo le aconsejo, él a veces me escucha y a veces no, y está bien, añadió la empresaria, dejando entrever que su matrimonio sería como cualquier otro ajeno a las esferas del poder.
¿Formará parte de la estrategia política de Donald Trump este nuevo discurso? La respuesta, probablemente, llegará con el paso de su mandato. Pero ahora, lo único cierto, es que Melania parece ser otra. Al menos, de cara al público.
En cuanto a su rol de primera dama, en la misma entrevista aseguró que retomará el proyecto de mejora de la salud mental de los jóvenes 'Be Best' y lo ampliará, apuntando específicamente al impacto de las redes sociales en la juventud. De momento, está seleccionando personal para su oficina, tarea en la que prima la austeridad. En sus propias palabras, no quiere "gastar mucho dinero de los contribuyentes", pero sí asegurar que los elegidos "tienen talento, están casados, saben lo que hacen, trabajan en equipo y no tienen una agenda propia".

Donald Trump y su mujer, Melania, cuando abandonaron la Casa Blanca en 2021. Gtres
Melania vivirá en la Casa Blanca junto a su marido, pero no descuidará su labor de madre. Cuando sea necesario viajará a Nueva York, donde estudia Barron (18), su único hijo y el quinto para el mandatario. Si la agenda se lo permite, volverá a Palm Beach, tradicionalmente su casa vacacional.