Harald de Noruega, el Rey que pudo casarse con la emérita Sofía de no haber luchado por su relación con una plebeya

No es la protagonista. Pero la reina Sofía (86 años) tiene un papel secundario y simbólico en Harald and Sonja, la serie de Prime Video que relata la fascinante relación de los reyes Harald (87) y Sonia de Noruega (87) y que en español han titulado como La plebeya. Este pasado viernes, 14 de febrero, coincidiendo con el Día de San Valentín, la plataforma publicó dos capítulos de esta historia royal. En el primero de ellos ya aparece la figura de la madre de Felipe VI (57). 

Una de las primeras escenas transcurre en un acto celebrado en Windsor, en mayo de 1959. Aparece el exmonarca noruego Olaf V charlando con la madre de Isabel II. "¿Cómo está Harald?", pregunta ella. "Terminando el entrenamiento militar", responde él. "Sabes a lo que me refiero", insiste la británica. "Ya he invitado al rey Pablo y a la reina Federica junto con la princesa Sofía e Irene a Oslo en agosto". El soberano, así, planificaba un encuentro entre su hijo y la que fuera princesa de Grecia y Dinamarca. 

"Sofía tiene la edad de Harald, ¿cierto?", comenta quien da vida a Isabel Bowes-Lyon. "Así es", responde el actor que personifica a Olaf V. "Sería una perfecta unión", asegura ella. 

La gran historia de amor de Harald y Sonia de Noruega que rompió con todos los cánones de la realeza

Esta significativa escena introduce a una historia que no pudo ser. Harald de Noruega fue el primer amor de la reina Sofía, casi por imposición de su madre, la reina Federica, quien tuvo claro desde el primer momento que él era el candidato perfecto para su hija.

Pero fue un amor no correspondido. El actual soberano nórdico quedó prendado de Sonia, su actual mujer, desde que coincidieron en una cita entre amigos. Y aunque parecía una relación imposible, siendo ella una plebeya, el Rey consiguió la aprobación de su padre y del Gobierno. 

Harald V y Sonia de Noruega, el día que anunciaron su compromiso. Gtres

El primer capítulo de la serie relata aquellos primeros encuentros. "El príncipe Harald se gradúa de la academia militar, pero su reputación no está en su mejor momento. La prensa, el pueblo noruego y la realeza europea aguardan para ver a quién elige como su futura reina. Los rumores afirman que se quiere casar con la princesa Sofía de Grecia, ¿pero quién es la plebeya Sonia Haraldsen que ha despertado el interés del joven príncipe?", aporta como descripción Prime Video. 

A lo largo del episodio se suceden escenas de dos periodistas que tienen el rumor de la posible relación entre Harald de Noruega y la emérita de Sofía. Ambos buscan conseguir su primera foto y acuden a aquel encuentro previsto por rey Olaf entre la Casa Real nórdica, los Reyes helenos y sus hijas. Pero lo cierto es que otra publicación coloca en el radar a Sonia tras captar una imagen de la plebeya con Harald, el día que éste se graduaba de la Academia Militar.

Una revista publicó en su portada una imagen de Harald y Sonia que revolucionó a la Corona y a los nórdicos. Nadie veía con buenos ojos la relación de un heredero con una plebeya. "Habrá situaciones donde la posición en la que has nacido entre en conflicto con lo que deseas hacer, pero tu posición va siempre por delante", dice Olaf V en la serie, en medio de una cena íntima con su hijo. Pone de ejemplo a la reina Isabel II y cuestiona la actitud de Eduardo VII, quien abdicó por su amor a Wallis Simpson. "No hacemos eso en nuestra familia", insiste el que fuera Rey de los noruegos. 

En la vida real, así como en la ficción, Harald se impuso a las normas, consiguiendo romper con los cánones de la realeza. Aunque su padre lo envió al extranjero una temporada y eran muchas las royals que tenían interés en él, nada ni nadie impidió la relación entre el actual monarca y Sonia. 

Los reyes Sonia y Harald de Noruega en una imagen de 2023 compartida por las redes de la Casa Real. Instagram

Harald fue firme, a pesar que la sociedad escandinava se puso en contra. En 1965 advirtió a su padre que si no le permitía casarse con la mujer que amaba, se negaba a dar el 'sí, quiero' a cualquier otra, poniendo en peligro la línea de sucesión. El ultimátum fue clave, aunque no decisivo. El actual Rey tuvo que esperar tres años para que su progenitor le autorizara a contraer matrimonio con Sonia tras nueves años de luchar por una relación que parecía imposible. 

Este fue el verdadero y gran motivo por el que no se fijó en la emérita Sofía, a pesar de que algunas crónicas también apuntan a un razón económica. De acuerdo con la periodista Françoise Loat, el Parlamento griego no quiso conceder al rey Pablo de Grecia los 50 millones de francos que habría solicitado como dote para su hija, pues solo estaba dispuesto a entregar la mitad de la cifra. Olaf V, presuntamente consideró que aquella cantidad era insuficiente y no hubo compromiso. Pero independientemente de aquella información, Harald siempre estuvo enamorado de Sonia.