Con la llegada del buen tiempo, a todos nos apetece lucir un bonito bronceado. A priori nos puede parecer una tarea complicada. Pero, para ello, tenemos a mano ciertos productos con los que podemos elaborar un bronceador casero para ayudarnos a conseguir el bronceado ideal.

Resulta evidente que el bronceador casero es un producto muy fácil de elaborar con elementos naturales. Sin embargo, debemos tener en cuenta que el autobronceador natural no nos proporciona ningún factor de protección solar. Presta atención, en este artículo te explicamos cómo hacer un bronceador casero con aceite de oliva. ¡Allá vamos!

Cómo elaborar tu propio bronceador casero

A sabiendas de que el bronceador casero, así como cualquier otro autobronceador natural, no son sustitutos de los protectores solares, te mostramos cómo crear un bronceador casero para tomar el sol a base de aceite de oliva. 

Existen varias opciones para elaborar un bronceador casero con aceite de oliva. Toma nota, estas son algunas de ellas:

  • Bronceador natural a base de aceite de oliva. Para usar aceite de oliva nada más como autobronceador, es fundamental que conozcamos primero los tipos que hay. Debes usar para este fin aceite de oliva 100%, asegurándote de que no esté procesado ni lleve ingredientes artificiales que podrían ocasionar daños en tu piel. Lo ideal es utilizar aceite de oliva virgen extra porque es el más puro. El mecanismo a seguir es simple: aplica el aceite por todo tu cuerpo con la ayuda de un disco desmaquillante o con tus propias manos. Y recuerda, no debes estar más de media hora seguida tomando sol con este bronceador casero. Pasado este tiempo, enjuágate bien para eliminar el aceite de tu cuerpo.
  • Bronceador casero con aceite de oliva, zanahoria y miel. Si quieres elaborar este bronceador casero para tomar el sol, necesitas meter en una licuadora tres zanahorias cortadas en rodajas. Añade a continuación tres cucharadas de aceite de oliva y una de miel, mezclando bien hasta obtener una solución uniforme y homogénea. Aplícala sobre la piel siguiendo los mismos pasos que en el apartado anterior.

Sea cual sea el bronceador casero que utilices, hacemos hincapié en que no tienen bloqueadores solares ni filtro, a diferencia de los protectores solares. De este modo, si los usamos de forma inconsciente, nuestra piel podría quemarse y sufrir daños severos que afecten a tu salud.

Precauciones antes de utilizar un bronceador casero

Si no quieres correr riesgos innecesarios y acabar con futuros problemas en la dermis, te recomendamos que sigas las siguientes recomendaciones antes de exponerte al sol:

  1. No utilices el bronceador casero para tomar el sol en zonas sensibles como cara o cuello.
  2. Evita aplicar el autobronceador natural en las horas en que se desaconseja tomar el sol, pues son las de mayor radiación.
  3. Nunca utilices el bronceador casero sin aplicarte una media hora antes una protección solar elevada.
  4. Puedes hacer uso del bronceador casero en las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde. Así te asegurarás de no dañar tu dermis.
  5. Nunca permanezcas expuesto al sol con un bronceador casero más de una hora bajo ningún concepto.
  6. El aceite de oliva es una gran alternativa para lograr un envidiable color de piel. No obstante, debes usarlo con precaución.

La importancia de protegerse del sol

A la hora de exponernos al sol, toda protección es poca. Lo dicen los expertos y es que una mala protección puede tener graves consecuencias. Y no solo en la piel, sino también en los ojos, por ejemplo, que también necesitan protegerse de los rayos ultravioletas. Por ello, debes saber que utilizar un bronceador casero para tomar el sol está bien, siempre que lo hagas con responsabilidad, como te hemos indicado. Pero ten en cuenta que entre un 5 y un 10% de los casos de cáncer de piel tienen su origen en los párpados. Así que presta especial atención a esta zona cuando te eches tu crema protectora.

Mucha gente desconoce todavía que la radiación UV está presente no solo cuando hay sol, sino todo el tiempo, incluso cuando está nublado. Esta radiación es muy intensa, lo que significa que es una amenaza no solo para nuestra piel, también para nuestros ojos. La próxima vez que vayas a comprar unas gafas de sol, opta por las lentes grandes para proteger los ojos lo máximo posible… Y cómpralas en una óptica, siempre serán de mayor calidad y estarán homologadas.

Por último, como dijimos más arriba conviene emplear un protector solar antes de aplicarnos el bronceador casero para tomar el sol. Por ello, conviene conocer las siglas que aparecen en todas las cremas protectoras para que nuestra elección sea la acertada:

  • SPF50. Señala el factor de protección contra los rayos UVB y calcula el tiempo que tu piel tarda en quemarse. El escudo que te ofrece la crema multiplica esa cantidad de minutos por el número indicado, en este caso serían 50.
  • Dry Touch. Se refiere a su textura y al acabado no pegajoso. En la actualidad, ha mejorado mucho la densidad de las fórmulas de fotoprotección.
  • UVB + UVA. Son los rayos solares más perjudiciales. Los UVB producen las quemaduras y el cáncer de piel, pues dañan y modifican el ADN de las células. Los UVA también pueden quemarnos, y además tienen la culpa del envejecimiento prematuro.
  • HE + IR – A. Esta protección tiene en cuenta la luz visible o HE, que produce quemaduras, y la infrarroja o IR, que tiene un efecto térmico dañino en las capas más profundas de la piel.

Por la salud de tu dermis y de tu cuerpo en general, no dejes de seguir estas sugerencias antes de utilizar un bronceador casero para tomar el sol. Tu piel te lo agradecerá.