Un orzuelo es un bulto rojo con apariencia de grano que se forma en el borde externo del párpado. Estos bultos suelen ser particularmente molestos y dolorosos debido a la infección bacteriana, que se origina cuando una de las diminutas glándulas sebáceas alrededor de las pestañas se bloquea, ya sea por suciedad o acumulación de piel muerta. La curación de un orzuelo puede lograrse mediante tratamientos médicos o farmacológicos.

Después de abordar cómo curar la conjuntivitis en otro artículo, nos enfocaremos ahora en los métodos para tratar un orzuelo.

Por qué salen los orzuelos

Los orzuelos, o granitos en el ojo, son notoriamente visibles y pueden ser detectados a simple vista. Los síntomas comunes incluyen dolor agudo, hinchazón del párpado, color rojizo, picazón, incomodidad, aumento de la producción de lágrimas y la posibilidad de que se forme una costra alrededor del párpado.

Cómo curar un orzuelo

La aparición de orzuelos se atribuye a la infección en esta zona de la piel del ojo, ya sea por acumulación de suciedad y proliferación bacteriana, o por un exceso de piel muerta alrededor del lacrimal.

Aunque los orzuelos son generalmente inofensivos y tienden a sanar por sí mismos en aproximadamente una semana, pueden resultar molestos debido al dolor que causan. Para acelerar su curación y minimizar el riesgo de contagio, es recomendable aplicar ciertas técnicas. El contacto con un orzuelo puede propiciar el desarrollo de otro en otras personas u originar otras infecciones.

Cómo quitar un orzuelo: tratamiento

Los tratamientos más efectivos para el orzuelo suelen ser aquellos más tradicionales, como el uso de compresas tibias y la limpieza meticulosa de los párpados y lacrimales con jabón neutro.

Sin embargo, existen también diversos remedios caseros que han demostrado ser eficaces para aliviar el dolor, reducir la hinchazón y mitigar las molestias asociadas al orzuelo. Estos incluyen:

  1. Compresas tibias: Este método es altamente eficaz. Aplica una compresa tibia sobre el ojo afectado, ya que el calor ayudará a que la pus se libere naturalmente, facilitando el drenaje del orzuelo. Humedece un paño con agua tibia (no demasiado caliente), escúrrelo bien y colócalo sobre el ojo durante 10 a 15 minutos. Es esencial no aplicar presión ni intentar reventar el orzuelo, ya que esto podría expandir la infección. Puedes realizar este procedimiento de 3 a 4 veces al día.

  2. Limpieza con jabón suave: Utiliza un jabón suave, como el de bebé o un champú para bebés, y mézclalo con agua tibia. Limpia suavemente los párpados con un paño limpio o un disco de algodón. Este método no solo ayuda a tratar el orzuelo, sino que también puede prevenir su reaparición. Realiza esta limpieza hasta que el orzuelo se haya curado.

  3. Té caliente o manzanilla: Hierve agua y viértela en una taza. Agrega una bolsita de té (preferiblemente té negro por sus propiedades antibacterianas y antiinflamatorias) o manzanilla. Deja que el agua repose por un tiempo, espera a que se enfríe y el agua esté tibia. Exprime la bolsita y colócala sobre el ojo durante 5 a 10 minutos. Este método ayuda a reducir la hinchazón y proporciona alivio.

Estas medidas son seguras y efectivas para tratar el orzuelo, pero es importante recordar que si persisten los síntomas o la situación empeora, se debe buscar atención médica.

Qué no hacer cuando te sale un orzuelo

Cuando un orzuelo causa dolor agudo, el uso de Ibuprofeno puede ser beneficioso para aliviar el dolor, ya que este medicamento también posee propiedades antiinflamatorias. Aunque generalmente no es necesario acudir al médico a menos que el dolor sea severo, en caso de consulta, es probable que recete antibióticos locales, como pomadas o gotas, para aplicar en el ojo con precaución y delicadeza. Estos tratamientos ayudan a reducir el dolor y desinfectar la zona afectada.

Durante el período en que se padece un orzuelo, se recomienda evitar el uso de maquillaje en los ojos, ya que no solo resultará incómodo, sino que también podría retrasar el proceso de curación y, lo más importante, propagar la infección a los productos de maquillaje y pinceles. Es esencial limpiar regularmente los pinceles con agua tibia y jabón neutro.

Además, se aconseja abstenerse de usar lentes de contacto y optar por gafas durante este tiempo. Si se utilizan lentes de contacto, es fundamental lavarlas con agua tibia y jabón neutro para evitar reinfectarse. Nunca se debe intentar reventar un orzuelo, ya que esto podría empeorar la situación. La aplicación de compresas o bolsas de infusiones, junto con la limpieza diaria de la zona, acelerará la curación del orzuelo, permitiendo que se seque naturalmente.