Tanto en hombres como en mujeres, el deseo sexual es variable dependiendo de la persona y de factores de todo tipo, desde el estrés a los cambios en las circunstancias ambientales.

Ya hablamos en cómo aumentar la libido femenina de los condicionantes que pueden causar estas bajadas, ahora trataremos el descenso de la libido en el caso de los hombres.

Qué es la libido

La libido es el deseo sexual. En medicina, se controla el nivel de libido porque una libido más baja de lo habitual en el individuo puede ser síntoma de algún tipo de desarreglo físico o psíquico. De hecho, los desajustes de la libido fueron considerada por Freud como síntoma de la mayoría de los trastornos de la personalidad, y la terapia del sexo formó parte durante mucho tiempo de las teorías freudianas.

Dado que socialmente no se percibe de igual manera la libido masculina que la femenina, ya que estamos acostumbrados a que los hombres expresen abiertamente su libido mientras en las mujeres la excitación sexual suele quedar muy a menudo en el ámbito de lo privado.

Cómo se manifiesta la bajada de la libido

Cuando la libido desciende, los hombres dejan de tener el interés en mantener relaciones sexuales. Las reacciones físicas ante la presencia del objeto antes deseado se vuelven más tenues y desaparecen o se reducen las fantasías sexuales.

Causas del descenso de la libido masculina

Aunque la reducción de la libido puede estar causada simplemente por algún tipo de trauma y venir de la infancia o iniciarse a temprana edad, también puede presentarse en edad adulta, después de un tiempo de desempeño sexual normal, y deberse a distintas causas:

  • Factores psicológicos: una de las cuestiones que más afectan a la libido son las enfermedades mentales, en especial las que incluyen la depresión y/o de ansiedad. En esas condiciones, se produce un bajón anímico tal que el cuerpo no reacciona normalmente ante los estímulos. Asimismo, ciertos traumas infantiles o un historial de represión de la sexualidad, o haber sido abusado sexualmente, pueden contribuir a que la sexualidad sea vista como algo a evitar.
  • Factores hormonales: dado que la libido depende, a nivel físico, de una correcta secreción de testosterona, la testosterona baja deriva en baja libido.
  • Factores físicos: en algunas ocasiones, el estar sufriendo algún tipo de enfermedad o tener algún tipo de deformidad o de disfuncionalidad, sexual o no, puede hacer que el deseo sexual desaparezca o se reduzca.
  • Factores farmacológicos: finalmente, hay que entender que la toma de ciertos fármacos puede inhibir el deseo sexual o causar otros tipos de disfunciones sexuales. Estos efectos son frecuentes con los tratamientos para la depresión, por ejemplo.

Cómo aumentar la libido

Existen varias maneras de aumentar la libido, algunas basadas en la sabiduría popular y otras que responden a prescripciones médicas. Elegir unas u otras depende solo de la gravedad que revista el problema: si se trata de una bajada puntual o leve de la libido, debida a algún repunte del estrés, o a un exceso de cansancio, por ejemplo, es probable que una mejora de la alimentación o el recurso a ciertos remedios naturales baste, mientras que si se trata de algo continuado probablemente requieras de tratamientos médicos.

Alimentos que aumentan la libido

Existen una serie de alimentos que se consideran afrodisíacos, es decir, que tienen componentes que son capaces de activar el riego sanguíneo. En todo caso, estos son los alimentos más útiles:

  • Frutos secos: aunque su efecto es más sobre el rendimiento sexual que sobre el deseo.
  • Aguacate: que contiene suficiente vitamina E como para incidir directamente en el apetito sexual.
  • Sandía: gracias a la citrulina que contiene su corteza, consigue la relajación de los vasos sanguíneos de una manera similar a como lo hacen los vasodilatadores como el Cialis o la Viagra.
  • Ginseng: cuya ingesta supone una mejora en la capacidad de erección.
  • Maca: cuando el descenso de la libido se debe a un bajón en el estado de ánimo, la maca puede ayudar.
  • Azafrán: que mejora el apetito sexual.
  • Ostras: cuyo alto contenido en zinc puede mejorar el rendimiento sexual, y cuyo aspecto similar al de una vagina puede estimular la imaginación.
  • Algas (especialmente el kombu): remineralizan el organismo, aumentan el vigor y el apetito sexual.

Remedios naturales

  • Canela con miel: una cucharadita de este remedio cada mañana estimulará tu vitalidad y logrará, con sus propiedades caloríficas y estimulantes, que tu apetito sexual mejore.
  • Baños de sol: que aportan al organismo vitamina E.

Soluciones médicas para la libido masculina

Las soluciones que provienen de la medicina son de dos tipos:

  • Terapia psicológica: tanto si el origen de la bajada de la libido es psíquico como si se trata de algo físico, la terapia psicológica suele ser necesaria, ya que la pérdida de la libido y el descenso del deseo sexual suelen estar asociados o, en según qué casos, provocar, un descenso de la autoestima. En otro post ya hablamos de cómo subir la autoestima pero si observamos que no es suficiente, la terapia puede ayudar a recuperar esa confianza y también a curar los males que causan la falta de deseo.
  • Farmacología: los tratamientos farmacológicos pueden estar basados en la estimulación sexual, para lo cual se usan vasodilatadores que actúan directamente sobre la zona genital, o terapia hormonal para aumentar la testosterona, pero también suele hacer falta atajar otros problemas, desde la depresión a la hipertensión. Eso plantea un problema, ya que entran en juego las interacciones entre fármacos con efectos contrarios. Además, a diferencia de la terapia psicológica, la terapia farmacológica tiene riesgos físicos.