Tocar la flauta puede ser una meta que podemos lograr. Como todos los instrumentos musicales, tiene una curva de aprendizaje, pero en el caso de la flauta no es muy pronunciada. Pero hay que tener constancia para aprender a tocar bien este instrumento.

Una flauta tiene ocho agujeros y para que suene, hay que tapar los agujeros precisos con los dedos. Cada uno de los agujeros representa a una nota musical, por lo que hay que conocer qué nota suena en cada caso. Su forma es alargada, cuenta con una boquilla en un extremo y un agujero en el otro.

Cuando se sopla, el aire irá filtrándose de formas diferentes a medida que vayamos tapando agujeros. Para aprender a tocar la flauta, lo mejor es comenzar por el modelo más sencillo. Seguro que conoces las flautas de color hueso que se usan en los colegios desde hace años. A esta flauta se le conoce como flauta dulce, debemos empezar aprendiendo a tocar este tipo de flauta, y luego pasar a otras más complicadas.

Aprender las notas y conocer el pentagrama

Sin ello, no se tendrá una base sobre la que sustentar los conocimientos para podar tocar la flauta.

El pentagrama es el lienzo donde van las notas musicales que debemos aprender. Lo primero que se verá es la clave de la partitura. Puede ser en clave de sol, re, mi o cualquiera del resto de notas musicales. En este caso, la flauta usa de forma general la clave de sol.

El compás vendrá expresado en fracción e indica la duración que deben tener las percusiones. También nos encontraremos con las notas, las cuales están puestas en un dibujo de cinco líneas y cuatro espacios. Se necesita aprender dónde están las notas en clave de sol y colocarlas en las líneas y espacios del pentagrama.

En la parte superior, nos encontraremos con las notas sostenidas. En este caso, hay que dibujar líneas adicionales para que puedan ser representadas. Posteriormente debemos mirar cómo es una nota determinada porque tienen su propio significado. Si es negra, se trata de un compás; si es blanca son dos compases y si es una corchea, es medio, por ejemplo.

Aprender a leer las notas no es algo que se haga en una hora, requiere paciencia, pasión y muchas pruebas. Solo probando y probando, iremos adquiriendo el conocimiento necesario. En un tiempo, podremos leer las notas de una forma relativamente sencilla. Si seguimos practicando, podremos interpretarlas cada vez más rápido.

Expresar las notas

En la parte superior de la flauta nos encontraremos con siete agujeros y en la inferior con uno. El de abajo debe taparse siempre y el resto de agujeros representan las notas musicales. Los agujeros van de arriba a abajo en el mismo orden de las notas. 

Para conseguir las notas estándar, tendremos que ir tapando los agujeros de forma progresiva. Para el do, solo taparemos el primero, pero para lograr hacer sonar la nota fa, tendremos que tapar el agujero del do, re, mi y fa. Siguiendo esta regla de tres, ya sabremos cómo hacer que suene cada nota musical en la flauta cuando la toquemos. Los sostenidos se llevan a cabo destapando un poco el agujero de abajo del todo, pero es más complejo.

El aprendizaje siempre debe hacerse desde el principio

Cuando se sepa cómo interpretar el pentagrama, reconocer las notas y tocarlas, llega el momento de comenzar a tocar. Los expertos insisten en la importancia de realizar estos pasos antes de lanzarse a la práctica. Reconocen que comenzar primero por tocar es un gran error que puede generar defectos y manías.

Además, al ver que no se hace bien (por falta de conocimientos) es fácil que aparezca la frustración y baje nuestra autoestima La psicología moderna nos avisa que no debemos de exigirnos demasiado

El mejor consejo es comenzar por lo más fácil, con temas sencillos, notas básicas y ningún sostenido como indican los diferentes tratados de autoayuda. Los temas de música para flauta que podemos encontrar en libros de música infantiles, son un buen comienzo. Son de nivel principiante y serán de gran ayuda cuando estemos dando nuestros primeros pasos. No debemos sentirnos mal si usamos esta clase de libros, porque nosotros también aprenderemos como niños. De esta forma, lo haremos de una forma más fácil.

La práctica es el secreto del éxito

Quien sabe si algún día podemos tocar en presencia de público, como hablar en un auditorio puede ser un ejercicio temible, pero lo podemos conseguir practicando.

De poco vale practicar una sola vez a la semana o cada diez días. Si se quiere aprender a tocar la flauta, recuerda todo lo que has aprendido hasta el momento y esfuérzate. No tiene que ser todos los días durante horas y horas, pero con una o dos horas al día será suficiente. De esta forma se aprenderá de una forma más rápida y progresiva.

Los temas fáciles irán dando paso a otros más complejos, siendo la forma correcta de aprender. Se debe practicar bien la colocación de los dedos para evitar notas desafinadas. Además, también sirve para poder tocar el compás correcto que podemos leer en la partitura.

Otro aspecto de gran importancia es escuchar el tema original que estás interpretando. Así tendrás una referencia sobre la que guiarte. Una recomendación importante es tocar solo la misma canción hasta que se aprenda por completo. Cuando se toque sin problema, con todas las notas correctas, se podrá pasar a otro tema.