
Karlos Arguiñano.
La cena en un minuto de Karlos Arguiñano que protege el corazón y fortalece los huesos: lista en un minuto
Con ingredientes fáciles de conseguir y lista en un minuto, esta opción saludable es perfecta para cualquier día.
Más información: El alimento que Karlos Arguiñano jamás pide si va a un restaurante (y es muy habitual en España)
- Total: 1 min
- Comensales: 1
Karlos Arguiñano es uno de los cocineros más populares de la televisión en España. Durante más de tres décadas, ha compartido recetas y trucos que han conquistado a todo tipo de públicos. Su estilo cercano y su sentido del humor lo han convertido en un referente de la cocina.
Más allá de sus recetas, Arguiñano suele aprovechar su programa para contar anécdotas y hablar de otros temas. En muchas ocasiones, sorprende a la audiencia con confesiones sobre sus gustos y hábitos. Sus seguidores disfrutan tanto de su cocina como de sus historias personales.
Uno de sus secretos recientes ha sido su afición por un bocadillo muy sencillo. Ha revelado que le encanta merendar un bocadillo de sardinas, una opción fácil de preparar y muy saludable. Además, destaca que este bocadillo ayuda a reducir el colesterol, lo que lo hace aún más recomendable.
Un pescado muy beneficioso para la salud
La sardina es un pescado pequeño y alargado con un característico color plateado. Su popularidad en la gastronomía se debe a su excelente sabor, textura jugosa y alto valor nutricional. Además, es un ingrediente versátil que se encuentra en platos como tostas, pastas y ensaladas.
Es un pescado azul, lo que significa que es rico en ácidos grasos Omega-3. Contiene DHA y EPA, dos compuestos que ayudan a reducir el colesterol LDL y protegen la salud cardiovascular. Su consumo regular también beneficia la función cerebral y contribuye al bienestar general.
En invierno, las sardinas aportan nutrientes esenciales que pueden ser deficitarios. Son una excelente fuente de vitamina D, un nutriente clave para la salud ósea. En esta época, la menor exposición al sol reduce los niveles de esta vitamina, y su deficiencia puede favorecer problemas como la osteoporosis.
El consumo de sardinas también ayuda a compensar el sedentarismo propio del invierno. Su riqueza en Omega-3 tiene un efecto protector sobre el sistema cardiovascular. Además, contribuye a prevenir la inflamación y el envejecimiento celular, reduciendo el riesgo de enfermedades del corazón.
La cena en un minuto de Arguiñano
Karlos Arguiñano ha compartido muchas recetas a lo largo de su trayectoria, pero una de sus favoritas destaca por su sencillez y beneficios para la salud. Se trata de una cena rápida, ideal para proteger el corazón y fortalecer los huesos. Con ingredientes fáciles de conseguir y lista en un minuto, esta opción saludable es perfecta para cualquier día.
Ingredientes del bocadillo de sardinas y tomate
- 1 buen pan (barra o pan rústico)
- 1 lata de sardinas en aceite de oliva
- 1 tomate maduro
- Aceite de oliva virgen extra
- Tomillo (opcional)
- Pizca de sal
Paso 1
Lava, seca y corta el tomate en rodajas finas. Retira las semillas y corta la pulpa en daditos pequeños. Colócalos en un bol y añade un poco del aceite de la lata de sardinas, una pizca de sal y mezcla bien.
Paso 2
Corta el pan a la mitad y reparte los daditos de tomate aliñados sobre ambas mitades, extendiéndolos bien para que cubran la superficie.
Paso 3
Distribuye las sardinas sobre una de las mitades del pan. Si quieres darle un extra de sabor, espolvorea un poco de tomillo por encima.
Paso 4
Cierra el bocadillo y disfruta de una merienda nutritiva y deliciosa, ideal para cualquier momento del día.
Más beneficios de las sardinas
Otro beneficio importante es su capacidad para proteger la densidad ósea. Su contenido en calcio, yodo, magnesio y potasio favorece la fijación del calcio en los huesos. Esto ayuda a mantener el equilibrio de sales minerales y a controlar los niveles de sodio en el organismo.
Las sardinas también cuidan el cabello y la vista. Su aporte en hierro y zinc fortalece la estructura capilar, dándole mayor resistencia. Además, su contenido en retinol favorece la salud ocular y contribuye a la formación de rodopsina, un pigmento esencial para la retina.