Antonio Marcos, empresario, productor audiovisual e introductor del Jes-extender en España.

Antonio Marcos, empresario, productor audiovisual e introductor del Jes-extender en España. G. Valiente

Salud

La historia no contada del Jes-extender, el alargador de pene de la teletienda con el que un productor de cine X español pegó el gran 'pelotazo'

Antonio Marcos, el hombre que rodó la primera película X con discapacitados en España, asegura haber vendido más de 100.000 unidades en nuestro país. 

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"No sé los demás qué dirán, pero a mí me gustan grandes". Quien recuerda el canal de la teletienda, recordará, sin duda, esta frase de un anuncio que se salía de la norma por travieso. "Cinco centímetros me ha crecido", contaba a cámara un señor avalando las maravillas del producto. "Así es. Y el grosor, perfecta", seguía su jovencísima pareja. El producto en cuestión no era un cortador de verdura en daditos, ni una manta con mangas. Era el Jes-extender, un dispositivo que promete alargar los penes de los televidentes.

Poca broma, el anuncio fue un éxito. En su primera semana en antena se pidieron más de 500 unidades y en la segunda, más de 1.000, tal y como recuerda Antonio Marcos, el empresario que introdujo el aparato en España. El Jes-extender, que todavía se vende, consta de un aro por el que se pasa el pene y se apoya en el pubis, dos varillas que rotan para ajustarlo y una silicona que agarra el glande. Cuando se coloca, el mecanismo tira de la punta del pene y, según el anuncio, eso hacía que aumentara su longitud y diámetro al llevarlo unas horas al día. 

Aquello costaba 249 euros, pero, si aprovechaba la oferta de la teletienda, usted podía traccionar su pene por el módico precio de 149,90 euros. "La evidencia científica de que esto alargue el pene es reducida y hablamos de longitudes menores", explica Rodrigo García-Baquero, miembro de la Asociación Española de Urología (AEU). "Puede haber un aumento, pero requiere llevarlo muchas horas y a lo mejor en seis meses sólo has ganado un centímetro". Pero, ¡ojo!, porque los extensores de pene sí están en las consultas de Urología para otros usos alternativos. 

Si el hecho de que un alargador de pene se anunciase en televisión ya es llamativo, esperen a leer cómo llegó hasta ahí. El artífice de todo esto es el susodicho Marcos, un empresario que tenía una productora audiovisual con la que grababa anuncios para la teletienda y también cine para adultos. "Siempre he sido radical. Yo fui el primero que produjo una película X con personas con discapacidad y lo hice para remover conciencias", cuenta Marcos. El filme se llama Rompiendo barreras, es de 2006 y su protagonista padece ataxia.

Bienvenido, Jes-extender

Antonio Marcos —Antón Frames, en su faceta como director— cuenta que tenía muy buena relación con los directivos de la empresa de la teletienda para la que trabajaba. "Hablamos un día de que me tenían que dejar probar a vender algún producto mío", explica Marcos. Y el día llegó cuando, de visita en una feria internacional de cine X, encontró el Jes-extender, cuyo origen es danés. "Sería el año 1998 o 1999. Ni corto ni perezoso, les mostré a los directivos el producto y enseguida me preguntaron qué me había fumado".

Sin embargo, Marcos se ofreció a grabar él mismo el anuncio para que a aquella empresa no le costase dinero. Cuando recibió el visto bueno, compró 800 alargadores de pene y se lanzó a grabar esa pieza audiovisual que ahora se ha convertido en leyenda. "Nos hubiera gustado grabar un spot con más glamour, pero conocíamos el sector erótico y la idiosincrasia española. Aplicamos el conocimiento de las películas X que sabíamos que se vendían más a Canal+. Puede que el anuncio resulte hortera y casposo, pero llegó al público. Refleja quiénes somos", reivindica.

El anuncio se emitió en pleno agosto a principios de los años 2000, una época del año en la que la teletienda no tenía tanta audiencia. Pero el Jes-extender rápidamente saltó a la fama y Marcos tuvo que volar a Dinamarca para negociar precios con el fabricante. Este alargador de pene estuvo en las televisiones de España durante ocho años, fue el anuncio más longevo de la teletienda, según su director, y a los actores les reconocían por la calle. "No sabes la cantidad de veces que me he reído con la actriz que decía que le gustan grandes cuando me contaba que alguien por la calle le había dicho 'vaya, vaya'", cuenta.

Antonio Marcos muestra un extensor de pene de su propia empresa.

Antonio Marcos muestra un extensor de pene de su propia empresa. G. Valiente

Arriesgar con unos extensores de pene fue un presentimiento, explica Marcos. Y vaya si tuvo visión porque a día de hoy vende los suyos propios. "El Jes-extender era un dispositivo médico de clase uno dado de alta en la Comunidad Económica Europea. Venderlo en la teletienda era fácil, pero me fastidiaba que no se conociera como un producto para la Medicina", recuerda el empresario. El famoso anuncio desapareció cuando la crisis del 2008 barrió varias empresas de teletienda y entonces Marcos pegó un giro de guión. 

Extensor de pene español

Antonio Marcos quería vender el Jes-extender directamente a los médicos y habló con sus fabricantes. Terminaron tomando caminos separados: los daneses siguieron vendiendo este alargador de pene en sex shops y Marcos se lanzó a la senda médica. "La gente se quejaba de algunos aspectos de Jes-extender, así que lo mejoré: lo hice menos pesado y pusimos unas correas mejores. Así fundé Androgenital y ahora tenemos más productos para el suelo pélvico del hombre, vendemos también en Portugal y en Latinoamérica", resume este empresario.

El urólogo Rodrigo García-Baquero ha empleado productos de Androgenital con pacientes de su clínica: "Se puede utilizar para antes o después de una cirugía de enfermedad de Peyronie. Las personas con esta condición tienen el pene curvado porque en una de sus capas internas, llamada túnica, tienen una fibrosis". Esta fibrosis es un tejido cicatricial que forma una placa y, de esta manera, modifica la dirección del pene. "Si la fibrosis no está calcificada y las erecciones del paciente son buenas, se puede recomendar un extensor", explica el urólogo.

Ahora bien, García-Baquero reconoce que debe llevarlo entre cuatro y seis horas al día y puede resultar molesto. Por eso, explica que es mejor utilizar el extensor de pene —que en Androgenital ha pasado a llamarse TractorPen— después de la operación: "Localizamos la fibrosis, la cortamos y colocamos un parche de tejido artificial. Pero, claro, como el pene es un órgano que cambia de tamaño nos interesa que el pene cicatrice lo más estirado posible. Se pueden utilizar extensores o bombas de vacío en las semanas posteriores a la operación".

Detalle de la correa de TractorPen que sujeta el glande.

Detalle de la correa de TractorPen que sujeta el glande. G. Valiente

Entre Jes-extender y TractorPen, Antonio Marcos confiesa haber vendido más de 100.000 extensores de pene en nuestro país. En Estados Unidos ha surgido otro extensor de pene, el RestoreX, también para tratar la enfermedad de Peyronie. Por este nuevo camino, Marcos ve "muy bien" el futuro de su empresa: "En 2025 vamos a presentar otro mecanismo de tracción peneal que no existe hasta la fecha, están participando en ello médicos y también la Universidad Politécnica de Madrid". 

Por desgracia, el alargamiento de pene sigue estancado. "Sólo podemos en el quirófano crear una ilusión de que el pene es más grande. Se puede 'desenterrar' quitando grasa del pubis, cortar el ligamento suspensorio o mejorar el ángulo que forma con los testículos. También hay rellenos de ácido hialurónico o grasa del paciente, pero se reabsorben. Si alguien se plantea aumentar el pene, debe ser realista. Hay a quien por dos centímetros les sale a cuenta operarse e invertir el dinero", explica García-Baquero.

¿Tendrá el nuevo extensor de pene de Androgenital un anuncio tan memorable como lo tuvo Jes-extender? "No, no", ríe Antonio Marcos. "Nos interesa ser una empresa rigurosa, vendemos directamente a médicos. Pero va a ser revolucionario".