El Boletín Oficial de la Provincia publica hoy las nuevas Bases Reguladoras para la concesión de las subvenciones municipales a la creación de empresas, tras la modificación establecida en el acuerdo presupuestario del equipo de Gobierno con el grupo de Ciudadanos y la concejala no adscrita, por la que sube en un 50% la cuantía máxima de las ayudas y se incrementa hasta 180.000 euros el presupuesto municipal para estas ayudas.

Las ayudas se destinan tanto a la financiación de las inversiones para la puesta en marcha de la actividad empresarial como a los gastos de alquiler del local y pueden alcanzar hasta un máximo de 9.000 euros -frente a los 6.000 euros de la convocatoria anterior- y el 80% de los gastos del alquiler.

La empresa puesta en marcha deberá general al menos un empleo nuevo, bien como autónomo o un contrato laboral a jornada completa y al menos un año de duración. Las ayudas a la inversión son para empresas de nueva creación, quedando excluida por lo tanto la ampliación de una actividad ya existente, y en el caso del arrendamiento se excluyen aquellos en los que el arrendador tenga relación de parentesco de hasta segundo grado con el titular de la oficina o local.

Son además requisitos necesarios que el inmueble afecto a la actividad esté radicado en el término municipal de Zamora, que se haya efectuado una inversión mínima de 6.000 euros para la puesta en marcha del proyecto, y que la actividad empresarial se mantenga al menos un año desde el momento en que se produzca el alta fiscal.

Una vez publicadas las nuevas Bases, el Ayuntamiento efectuará lo largo del año dos convocatorias para la presentación de las solicitudes por parte de los emprendedores que hayan puesto en marcha el proyecto empresarial, desde los seis meses anteriores al alta fiscal y hasta el mismo momento en el que se realice la solicitud de la subvención.

Como se recordará, en el acuerdo presupuestario con Ciudadanos y la concejala no adscrita, además del incremento de las ayudas a emprendedores se incluía el impulso y mejora de los polígonos industriales y analizar la posibilidad de establecer incentivos fiscales, siempre que fuera legalmente posible.

Además, en el caso necesario se complementarían las partidas para que ninguna empresa nueva se quedara sin subvención por falta de crédito.