Una foto fija del Miércoles Santo. Ese es el objetivo que pretende la exposición, organizada por la Real Cofradía del Silencio de Zamora con motivo del decimo aniversario de la concesión del titulo de Real, ubicada en la iglesia de la Encarnación.

Esta visión de la actividad de la cofradía el miércoles santo se percibe a través de los caballos, de los peleteros y las cucharas que portan los encargados de estos, los tambores de apertura, del olor a incienso el sonido de la bomba o del chelo que deja la plaza en silencio durante el Miércoles Santo, de fotografías de Félix Marbán la procesión, así como del Cristo de las Injurias que engloba la exposición.

Una muestra que como explica Rufo Martínez, presidente de la cofradía, “todos los elementos están congelados y el espectador es el único que se mueve a través del recorrido en el que también hemos pretendido simular la transición entre la tarde y la noche ya que al entrar hay más claridad que se va apagando a medida que te adentras en la exposición.

Este recorrido por el Miércoles Santo podrá ser visitada por el público desde mañana sábado hasta el 18 de marzo de 11 a 14 horas en horario de mañana (a excepción de la jornada matutina del día 16 debido a un acto del Cuponazo de la Once) y de 17 a 21 horas por la tarde.

la Real Cofradía del Silencio de Zamora adquirió dicha distinción hace diez años gracias a la labor del anterior presidente Jesús Palla trabajo que no llego a ver culminado su propósito al fallecer 29 de febrero y el título es de junio de ese año. Una tarea que venia precedida de la actuación de otro de los dirigentes, Marcelino Martín, quien en 1976 ofreció a Juan Carlos I, recién corrocado, ser hermano de honor de la cofradía.