Valladolid vivió el 8 de marzo una histórica manifestación con motivo del Día de la Mujer, con una convocatoria secundada por decenas de miles de personas. La afluencia fue tan multitudinaria que obligó a modificar el recorrido y prolongarlo para poder dar cabida a los participantes. En el momento en que la cabeza de la manifestación se acercaba a Portugalete, punto final del recorrido, aún había personas iniciando la marcha desde la plaza de Fuente Dorada.

La subdelegación del Gobierno cifró la asistencia en 14.000 personas en función de la valoración de la Policía Nacional, “una cantidad muy escasa para lo que todo el mundo pudo ver en las calles”, ha asegurado hoy el alcalde, Óscar Puente, que ha indicado que su intención no es “entrar en ninguna polémica por las cifras”.

El alcalde ha recordado que en otras ocasiones “ha habido manifestaciones con mucha menos gente y se han dado cifras de participación más altas”. En este sentido, Puente ha explicado que considera que dar cifras de manifestantes “no es cometido de la Policía Municipal”.